"Desregulación de los servicios de internet satelital para permitir el ingreso de empresas como Starlink". Tal como lo había anunciado el presidente Javier Milei en la cadena nacional en la que presentó el DNU, el Gobierno desreguló los servicios de Internet para permitir la competencia de empresas extranjeras. La compañía, que ya ofrece su servicio a casi toda América, espera llegar a Argentina en el segundo semestre de este año. Aunque algunos creen que los tiempos se pueden acelerar y no se descarta que llegue en marzo. Según el portal Infobae, podría lanzarse este martes 26 de marzo.
Hace tan solo unas semanas, el Enacom autorizó a Starlink y a otras dos compañías de Internet satelital (Kuiper y OneWEB) para que puedan operar en nuestro país a partir del segundo semestre del año. Empresas como Frávega y Mercado Libre, además del sitio web de la propia empresa, ya permiten que los consumidores reserven su kit antes de que esté a la venta de manera oficial.
A diferencia de otras compañías, el proyecto de Elon Musk se caracteriza por llevar la conectividad a zonas campestres, pesqueras y mineras donde el Internet convencional no puede por falta de infraestructura. Su prestación ofrece Internet de alta velocidad -que promedia velocidades de internet de 200Mbps- y baja latencia a usuarios de todo el mundo, además de que gracias a la portabilidad de la antena los usuarios pueden llevar su conexión a internet a donde quiera que vayan. A esto se le suma que el cliente puede cancelar el servicio cuando lo disponga ya que no hay ningún tipo de contrato.
Aunque todavía falta la confirmación oficial, en la mayoría de los países el valor mensual es de US$ 90, más el equipamiento de US$ 600. Sin embargo, los montos en Latinoamérica son más accesibles ya que la empresa tiene en cuenta el poder adquisitivo de cada región, por lo que se cree que en nuestro país el valor será menor, acercándose a un costo inicial de $500.000, con una cuota mensual entre $50.000 y $60.000.
Cómo se instala Starlink
Para conectarse a Starlink, los usuarios deberán adquirir un kit que incluye:
- Una antena parabólica rectangular
- Un enrutador Wi-Fi
- Un cable de alimentación de 6 metros
- Un cable de red de 23 metros
- La antena, diseñada para ser instalada al aire libre, se orienta automáticamente hacia los satélites y se encarga de recibir y enviar señales.
La instalación es sencilla y está pensada para que cualquier usuario pueda realizarla. Primero, se debe elegir una ubicación con una vista despejada del cielo, libre de obstrucciones como árboles o edificios.
Luego, siguiendo las instrucciones de la app (la aplicación para la instalación está disponible tanto en Google Play y Apple Store), se conecta el cable de red a la antena y el cable de alimentación al "router".
Una vez encendido, el sistema automáticamente buscará y se conectará a la red de satélites.
