Por Pablo Varela
El senador por la provincia de Chubut del PRO, Ignacio Torres, se mostró crítico del discurso del presidente Alberto Fernández ayer, ante los legisladores nacionales al dar inicio al período ordinario.
Con fuertes señalamientos a la interna de la coalición oficialista, el senador patagónico marcó ante El Economista, el que el oficialismo tendrá dificultades en reunir los “consensos” para aprobar el acuerdo con el FMI, en la medida que no haya un rumbo clarificado.
¿Cómo evalúa el discurso del Presidente?
El de Alberto Fernández fue un discurso más para Cristina que para todos los argentinos. Fue un discurso tribunero, sin nada concreto, sin una agenda de desarrollo inteligente. Fueron más que nada justificaciones por la pandemia y chicanas. Lo cierto es que esperábamos otra cosa, un tono distinto, moderado, dialoguista y republicano e insisto, vimos un discurso tribunero más orientado a la contención de la tropa propia que para hablarle a la sociedad argentina.
¿Cómo evalúa que los legisladores del PRO se hayan levantado en medio del discurso del Presidente?
Hubo una actitud dividida, algunos se levantaron y otros no. Yo creo que hay un hartazgo generalizado. Cuando piden institucionalidad y piden acompañamiento sobre todo en una negociación tan importante como es la relacionada con el FMI, ver como mienten con un grado de cinismo sorprendente, cansa, agota, y así como cansa a todos los argentinos también cansa a sus representantes. Lo que sí creo que va a ser muy difícil para el presidente Fernández hablarle únicamente a su interna y obtener ese consenso que necesitamos frente al FMI.
En Juntos por el Cambio tampoco definen posición respecto del acuerdo con el FMI. ¿Van a tomar esa decisión con la “letra chica” del entendimiento?
La verdad es que yo leí una cosa y escuché otra. Cuando uno escucha que hay una agenda de crecimiento, pero no se menciona nada en lo relacionado con austeridad fiscal, ni ninguna otra reforma concreta, llama la atención. Básicamente el Presidente dijo 'no vamos a hacer nada'. Por lo tanto si esa es la actitud del jefe de Estado, y que es muy distinta a la que dice el ministro de Economía, Martín Guzmán, y totalmente antagónica a la que el expresidente de la bancada oficialista, Máximo Kirchner, es muy difícil poder llegar a ese consenso sobre un acuerdo sobre el que no se sabe absolutamente nada. Es todo un cambalache.
Entre los proyectos que impulsa el Poder Ejecutivo está el nuevo marco para las inversiones en materia de hidrocarburos. Usted es de una provincia productora. ¿Opinión?
El Presidente habló de Vaca Muerta. No habló de los pozos convencionales, no habló de la cuenca de Chubut. A nosotros nos preocupa porque puede darse una situación de destrucción de empleo en lo que tiene que ver con los pozos convencionales si no hay inversión en el corto plazo. Nosotros somos una cuenca madura y queremos ni más ni menos que las mismas condiciones que tengan los no convencionales en materia de alivio fiscal y de promoción. También va a ser una discusión muy dura sobre todo si se piensa en un Gobierno tan débil como el que estamos viendo, que responde más a compromisos políticos que a una agenda de desarrollo industrial en una cuestión tan clave y estratégica como son los hidrocarburos.
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¿Qué desafíos tiene Juntos por el Cambio a nivel legislativo para este año?
Yo creo que el principal desafío que tenemos es en el de tener una agenda propia y no ir siempre detrás de la agenda del Poder Ejecutivo. Hoy tenemos más volumen y más fuerza como para poder tener una agenda protagónica, responsable, que apunte a una Argentina más federal, a una matriz impositiva menos regresiva y más justa. Para eso es importante que dentro de Juntos por el Cambio haya coherencia y obviamente voluntad de diálogo.
