Mientras que el presidente Javier Milei intensifica sus críticas a los gobernadores, a los que acusa de "traidores" por el fracaso de la Ley Ómnibus y avanza en la eliminación de fondos fiduciarios y subsidios, algunos mandatarios provinciales intentan tender puentes con un sector del Gobierno.
Para lograrlo, el mandatario de Salta, Gustavo Sáenz, está organizando una reunión con algunos de sus pares y el ministro del Interior, Guillermo Francos. "Quieren soluciones", explican desde su entorno.
El gobernador salteño fue uno de los "traidores" señalados por el Presidente. Tras el voto negativo de los legisladores provinciales a una parte de la Ley Ómnibus, Milei decidió echar a la secretaría de Minería, Flavia Royón, oriunda de la provincia del norte.
Sáenz tensó el vínculo al contestar las acusaciones de Milei. "No nos vamos a arrodillar ante nadie, nunca. Solo ante Dios. Acá no hay traidores ni mentirosos. Acá hay hombres de bien que están pagando las consecuencias de muchos que se enriquecieron y llevaron la plata a otro lado. Persigan a ellos, búsquenlos a ellos", disparó.
Pero dada la necesidad mutua entre Provincia y Nación, el establecimiento de vínculos entre los funcionarios de ambos niveles ejecutivos es fundamental. En ese marco, Francos será el encargado de articular la recomposición del vínculo con los mandatarios provinciales tras la caída de la Ley Ómnibus.
Es entonces que Sáenz organiza un encuentro en su provincia con el ministro del Interior en el que se hablará de gestión, pero que busca sobre todo poner paños fríos en la negociación con el gobierno de cara al futuro.
Sus pares de Catamarca, Raúl Jalil; y de Misiones, Hugo Passalacqua, ya confirmaron su presencia en el encuentro. También están invitados Osvaldo Jaldo, mandatario de Tucumán; Carlos Sadir, de Jujuy; y Gustavo Valdés, de Corrientes.
Además, Francos anunció este viernes que viajará a Salta este martes para participar de la reunión. Será la primera visita del ministro a una provincia desde su asunción.
El Gobierno planea reunirse con los mandatarios que consideren abiertos al diálogo. Descartan hacerlo con los gobernadores Axel Kicillof (Buenos Aires), Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ricardo Quintela (La Rioja), entre otros.
En la cúpula del Ejecutivo consideran que estos jefes provinciales se aprovecharon de la debilidad legislativa de La Libertad Avanza para "imponer las modificaciones que a ellos les parecía para la ley" y para presionar con la coparticipación del impuesto PAIS.
En ese clima de tensión, se busca lograr un acercamiento con el Gobierno y evitar que el diálogo se vea totalmente obstruido.
