El Gobierno reconoció ayer que, a sólo 47 días de esas elecciones, no hay margen político ni legal para cancelar las PASO del próximo 11 de agosto y habría desistido de impulsar una iniciativa en ese sentido. Desde Casa Rosada volvieron a insistir en que, sin duelo real en la categoría presidencial, es un gasto innecesario la organización de las primarias (calcula que demandará entre 3 y 4 mil millones de pesos), pero reconoce que la dificultad para lograr un acuerdo político entre todas las fuerzas que las deje a un lado en esta ocasión.
El lunes, el gobernador radical de Mendoza, Alfredo Cornejo, había reavivado esta discusión, al señalar que habría que suspender las PASO debido a que no habrá competencia interna en ningún frente electoral a nivel nacional ni provincial, e incluso instruyó a sus diputados y senadores nacionales a redactar un proyecto de ley con esa finalidad. Ayer, la polémica continuó con el pronunciamiento de distintos dirigentes. Entre ellos Miguel Pichetto; Agustín Rossi y Sergio Urribarri, quienes se manifestaron en contra de su suspensión.
Pichetto, precandidato a vicepresidente por el frente oficialista Juntos por el Cambio, coincidió en rever la necesidad de continuar con las PASO cuando no se están utilizando para dirimir candidaturas, pero rechazó cancelar las de agosto próximo. “Me parece algo complejo. En realidad va a haber un debate ahora en el Congreso, pero frente a la proximidad de las elecciones primarias, no lo veo fácil. Tal vez, la norma tendría que haberse cambiado con anterioridad”, evaluó el rionegrino.
“Las PASO son parte de las reglas de juego que provienen de una Ley que fue votada en el Congreso”, sostuvo el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. “No percibo que haya consenso para que se cambie la ley de aquí a agosto”, agregó el ministro político en el mismo sentido que Pichetto.
Desde la oposición, Rossi, jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria, utilizó también la palabra “disparate” pero para referirse al tema. “Es un disparate porque el proceso electoral se inicia en el mismo momento de la convocatoria de las elecciones. Es claramente ilegal porque modifica el proceso electoral en desarrollo”, manifestó el santafesino.