El Gobierno presentó el Presupuesto 2023 al filo del límite legal, mientras en la Cámara de Diputados se debatía la prórroga de impuestos que representan el 32% de lo recaudado por el Estado.
De no aprobarse el Presupuesto diseñado por Sergio Massa y su equipo de trabajo, la administración central podría entrar en una suerte de "shutdown", o cierre de la administración dado que el Presupuesto vigente es el de 2021 y fue prorrogado luego de que Juntos por el Cambio lo rechace en diciembre del año pasado. Legalmente, no se puede prorrogar consecutivamente dos años.
En ese marco, el Gobierno recogió el guante de las críticas recibidas por la oposición el año pasado y creen haber confeccionado un Presupuesto realista que contempla una inflación del 60% y un crecimiento del PIB de 2%, producto en buena medida del arrastre negativo que tendrá la economía en los últimos meses de este año en los que la actividad caerá tras el descalabro con el dólar producido en julio y el elevadísimo régimen de inflación en el que ingresó la economía. También creen que la inflación para el 2022 estará en torno al 95% y el crecimiento en 4%.
En ese marco será clave la negociación con los espacios de la oposición (fundamentalmente JxC) que hoy votó dividido y con duros cuestionamientos el Consenso Fiscal, y rechazó la prórroga de impuestos amparado en una vieja herida por la reforma de Bienes Personales.
Massa pasó por la madrugada por el Congreso para seguir de cerca el debate de leyes claves para el funcionamiento del Estado. Algunos de los tributos, cuya prórroga obtuvieron media sanción, se destinan a la Anses, el Incucai o a Fondos de Promoción y Educación Cooperativa.
Aún no hay fecha prevista para que Massa exponga en la Comisión de Presupuesto, aunque sí está contemplado que cada ministro vaya a defender lo proyectado en cada una de sus áreas.
En principio, habrá un pequeñísimo crecimiento en las partidas para obras públicas (1,58% a 1,61%) lo que garantizaría fondos para los mandatarios provinciales en un año electoral.
La mala noticia estará el en el recorte de subsidio al transporte, que bajará de 0,5% al 0,4% del PIB, si bien el Consenso Fiscal aprobado en Diputados otorga oxígeno a las cajas provinciales que podrían absorber el impacto.
El Presupuesto que ingresó en Diputados llegó con un apartado que le da la posibilidad al Congreso de (re)discutir toda una serie de beneficios impositivos corporativos que podrían mejorar la performance recaudadora del Estado. No se trataría de subir impuestos si no de mejorar recaudación por la vía de la quita de beneficios o exenciones, lo que pondría en un brete a la oposición que tiene como uno de los principales caballitos de batalla la baja de la presión impositiva.
El dólar tendrá un promedio de $219 a lo largo del año entreante y podría cerrar diciembre de 2023 cerca de los $269, con un ritmo devaluatorio por debajo de la inflación proyectada.
Lo que no se moverá son las metas acordadas con el FMI en las que el déficit primario deberá cerrar el 1,9%. El Gobierno cree que dicha meta se alcanzará primeramente con la reducción de subsidios a la energía y el transporte, y por otro lado con el ahorro que implicará el Plan Gas 4 y 5 presentados. Al mismo tiempo se muestran confiados de que el Gasoducto Néstor Kirchner estará apto para funcionar el próximo 20 de junio, dados los estímulos y castigos contemplados en las cláusulas de la construcción.
A su vez, en el Gobierno entienden que habrá que hacer un enorme esfuerzo en relación al salario privado que viene teniendo una caída sostenida en los últimos cinco años.
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Los supuestos macro del Presupuesto 2023
- En lo que respecta a la cotización del dólar, el proyecto de ley, que lleva la firma del titular del Palacio de Hacienda, Sergio Massa, prevé "mantener actualizado el tipo de cambio" por lo que se espera que hacia diciembre próximo se ubique en $166,50 por dólar y que finalice 2023 en $269, con un promedio de $219 a lo largo del año.
- Precisaron también que la proyección de déficit primario para el próximo año será equivalente al 1,9% del PIB, contra el 2,5% previsto para 2022, en línea con el compromiso asumido por el Gobierno nacional en el acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en marzo pasado.
- Esta baja se realizará a partir de una reducción de los subsidios y la eliminación de algunas excepciones impositivas vigentes. En este último aspecto, la novedad es que este proyecto de Ley de Presupuesto irá con un anexo en el que se le planteará al Congreso la posibilidad de eliminar algunos beneficios impositivos que suman un monto equivalente a 2,4% del PIB.
- Entre ellos estarán la excepción del pago del Impuesto a las Ganancias en jueces, beneficios que tienen directores de empresas y los impuestos internos de Tierra del Fuego, entre otros.
- Estas iniciativas van en línea con las discusiones mantenidas con el FMI, reflejadas en el comunicado del organismo del lunes pasado, tras el encuentro que el ministro Massa mantuvo con Kristalina Georgieva.
- Por el lado de los subsidios se reducirá un monto equivalente a 0,6% del PIB en los destinados de manera específica al sector energético, que quedarán en una cifra del orden del 1,6% del PIB el próximo año, ya sea por ahorro de consumo de la gente o por la actualización de tarifas.
- También se reducirá en 0,1% del PIB el subsidio al transporte, que quedará en 0,4%, como compensación a los colectivos interjurisdisccionales. Desde el Ministerio de Economía subrayaron que la tarifa de transporte de cada provincia la tendrá que disponer cada distrito.
- En lo que respecta a la obra pública, el proyecto de Presupuesto 2023 contempla fondos equivalentes al 0,3% del PIB.
- También proyecta que el Banco Central mantenga una tasa positiva respecto de la inflación y que acompañe la baja que esperan ir teniendo con el correr de los meses.
- En este marco, todo apunta a que el crecimiento de la economía será del 2% frente al 4% con el que cerrará este año. Como contrapartida, la expectativa de inflación es del 60% y estima que este año cerrará en torno al 95%, por debajo de las tres cifras que proyectan la mayoría de los analistas de mercado.
- Además, las proyecciones contemplan que los ingresos se recuperen en 2, hacia fin de 2023, con una tasa de desempleo que se mantendría en torno al 7% de la población económicamente activa.
- Además, se espera un aumento en las exportaciones de 7,1%, contra importaciones que se incrementarían 2%. De esta manera, el superávit comercial pasaría de US$ 7.700 millones este año a US$ 12.300 millones en 2023.
