Congreso

Javier Milei se embarra en la política y reconfigura el escenario parlamentario

La debilidad formal de LLA se contrarresta con el bloque político que tiene el Gobierno, que no sólo incluye al PRO y al MID, sino también a los radicales díscolos y los tucumanos ex-peronistas, entre otros
El presidente Javier Milei.
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Tras varias complicaciones en el Congreso, La Libertad Avanza recuperó el equilibrio y logró pararse con mayor firmeza en la arena parlamentaria

En la sesión del miércoles 11, la Cámara de Diputados no pudo rechazar el veto del presidente Javier Milei a la ley de Movilidad Jubilatoria. Así, el oficialismo negó el aumento del 8,1% en los haberes argumentando que la medida pondría en riesgo el equilibrio fiscal, la principal bandera del gobierno libertario. 

Uno por uno

El veto de Milei contó con el apoyo de los 37 diputados libertarios, incluido Martín Menem que citó un artículo que le posibilita votar, algo que no había pasado en junio. El PRO aportó otros 34, una diferencia importante dado que hace tres meses, para la aprobación del mismo proyecto, la fuerza que lidera Mauricio Macri había sumado 30 manos y varios ausentes de peso. Entre ellos el larretista Álvaro González, que ahora fue el único del PRO en votar contra el veto presidencial.

También fue clave el cambio en el sentido de voto de cinco diputados de la Unión Cívica Radical que visitaron a Milei en la Casa Rosada. Se trata de Mariano Campero, Federico Tournier, Luis Picat, Pablo Cervi y Martín Arjol. Salvo Tournier, el resto votó a favor de la reforma en junio y ahora la rechazó.

En tanto, el rechazo al veto sumó 153 voluntades pero no alcanzó los dos tercios. Estuvo encabezado por 98 diputados de Unión por la Patria; los cinco de la Izquierda, que se habían abstenido en junio; y un sector de la UCR, que alcanzó a 26 diputados.

Milei, en la rosca

Lo cierto es que, después de las malas experiencias, en los últimos días, el Presidente se involucró personalmente en las negociaciones con los diputados dialoguistas que podrían estar más cerca de La Libertad Avanza. Y así evitó un nuevo revés en el Congreso.  

"Milei se está embarrando los pies en un área que lo aburre, que es la política", definió Andrés Malamud en el podcast de El Economista

La situación obligó al primer mandatario a ir más allá de su discurso contra la "casta", que lo acompañó desde el inicio de su gestión hasta estos días. A fin de evitar nuevas complicaciones en su gestión y en la consecución de sus principales objetivos, Milei se vio obligado a negociar con la política. 

A pesar de ello, cabe destacar también que la oposición estuvo a apenas 13 votos del rechazo al veto presidencial. Los dialoguistas ahora definen si acompañan o no al Presidente en cada proyecto, conforme a lo que cada bloque priorice en su agenda. En ese marco, la definición de alianzas implica un entramado de conversaciones más profundas y complejas. 

Institucionalización de alianzas

Los contactos directos con el Presidente permiten, además, darle carácter formal a los diálogos que ya se vienen desarrollando desde hace tiempo. 

Lo cierto es que La Libertad Avanza necesita ordenar una estrategia para el corto y mediano plazo. Y el primer mandatario ya comenzó trabajos de "coordinación parlamentaria" con sus socios clave: el PRO y en menor medida el MID.

La conducta parlamentaria del espacio de Cristian Ritondo y el de Oscar Zago frente a las jubilaciones confirmó, una vez más, la alianza que existe entre los sectores. Y ahora la debilidad formal de LLA en el Congreso se contrarresta con el bloque político que tiene el Gobierno, que no sólo incluye al PRO y al MID, sino también a los radicales díscolos, los tucumanos ex-peronistas, algunos bloques federales, etcétera. 

El nuevo escenario en el Congreso muestra que el oficialismo, si bien tiene algunas dificultades a la hora de impulsar proyectos propios, definitivamente tiene capacidad para frenar aquellos que no le gustan al Ejecutivo, incluso en temas sensibles como son las jubilaciones.

La relación entre el PRO y LLA se mantendrá hacia las legislativas del 2025, donde la necesidad se vuelve mutua para ambos espacios. Mientras que el partido de Macri procurará retener la cantidad de bancas que cosechó en los comicios de 2021, el oficialismo intentará pulir la calidad de sus integrantes.   

Además, Milei ya no será la cara visible de las boletas, y por eso La Libertad Avanza necesitará de la estructura política del PRO para obtener buenos resultados en los comicios.