El sábado, finalmente, se concretó un encuentro de enorme peso simbólico, e impensado tiempo atrás, entre Cristina Kirchner y Sergio Massa. Las necesidades de ambos y la candidatura de Alberto Fernández lo hicieron posible. Cristina no se ha caracterizado por sus aciertos a la hora de definir estrategias electorales, pero hasta el momento, la decisión de impulsar a Alberto, le rindió frutos. Muchos gobernadores, que fueron críticos de Cristina durante los últimos años, y que eran la columna vertebral de una tercera vía que nunca despegó, se sumaron al Frente de Todos porque la presencia de Alberto les dio la coartada para hacerlo.
En el caso de Massa, su participación en la campaña electoral es intensa aunque su aporte electoral en la provincia de Buenos Aires es una incógnita. En la elección de senadores de 2017 en la que tuvo compartió boleta con Margarita Stolbizer, obtuvo 1.070.000 votos, pero en estos temas, las lecturas lineales no pueden hacerse. En el balotaje de 2015 el electorado de Massa demostró estará más cerca de Mauricio Macri que de Daniel Scioli, y además, el millón de votos que perdió entre aquellas elecciones y la de 2017 engrosaron, mayo ritariamente a Cambiemos. Pocos fueron para Cristina, que como candidata a senadora en 2017, obtuvo una cantidad de votos similares a los de Scioli en la primera vuelta. Y es razonable que así sea porque el mito fundante del massismo fue haber impedido con su triunfo en 2013 la re-re de Cristina. Por otra parte, casi 400.000 ciudadanos que en 2015 votaron a Massa para presidente, cortaron boleta a favor de María Eugenia Vidal.
Si bien el FdT sólo podrá contar con una parte de los votos de Massa en 2017, su incorporación es un activo porque es una figura conocida con experiencia en varias campañas y que circula por el conurbano sin GPS. Además, su mayor inserción la tiene en la primera sección electoral que es la que no presenta una tendencia clara porque se descuenta que el FdT ganará en la tercera y Juntos por el Cambio en el interior provincial.
El kirchnerismo no paga ningún costo adicional por la incorporación de Massa porque previamente había sumado a Alberto. Massa, a su vez, se legitima dentro del peronismo lo que permitirá seguir siendo un actor relevante de la política argentina cualquiera sea el resultado de las elecciones.
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En Merlo, con un viejo conocido
Sergio Massa apostó ayer por hacer campaña en un populoso distrito de la primera sección electoral bonaerense. Estuvo en Merlo, en compañía del intendente local, Gustavo Menéndez. Se trata de dos viejos conocidos: Menéndez fue parte del Frente Renovador, y en 2013 ganó una banca de concejal con ese sello. Es hora de construir puentes, frente a un gobierno que nos invita a nadar en el río, con un presidente que está en un yate mientras millones de argentinos se ahogan”, subrayó Massa ayer en Merlo, durante la visita en la que también lo acompañó su esposa y candidata a diputada bonaerense, Malena Galmarini. “En estos cuatro años perdieron millones de argentinos y ganaron los que tienen empresas de electricidad, gas, petróleo, nafta. A esa realidad, tan cruda y dolorosa que generó el Gobierno, el próximo domingo se le va a decir ?se terminó?. Viene una etapa nueva, con una nueva mayoría que dé esperanza, en la que el trabajo y la producción pondrán a Argentina de pie, en la que terminemos de verdad con la pobreza, que nos duele y nos golpea como pueblo”, completó.
