Esta tarde la Cámara Argentina del Libro advirtió que si el sector no es considerado crítico, las empresas del rubro podrían perder el beneficio del salario complementario, que se canaliza a través del programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), cuanto atraviesan "una de las peores crisis de su historia".
“Tras haber considerado algunos datos de recuperación de la economía respecto de los primeros meses de la pandemia, el Gobierno recomendó realizar algunas modificaciones para el ATP7 en el que se distinguen actividades críticas y no críticas. En esta adecuación, las actividades consideradas no críticas que presenten datos negativos de facturación serán beneficiarias de préstamos subsidiados, pero ya no del salario complementario”, recordó la entidad en un comunicado.
Sin embargo, sentenció: “El sector del libro atraviesa una de las peores crisis de su historia”. En ese sentido, indicaron que a la baja de la producción gráfica, la cual cayó más del 70% en los últimos cuatro años, y “la fuerte caída” de las ventas en el mercado interno, que mermó alrededor del 50% acumulado, la situación generada por la pandemia de coronavirus “ha sido devastadora, con caídas en la facturación cercanas al 90% durante los meses de marzo, abril y mayo de 2020”.
“En marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio, las editoriales, librerías e imprentas no han podido trabajar con normalidad, dentro de lo que se debe incluir el haber perdido la posibilidad de participación y venta tanto en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires como en todas las ferias provinciales y municipales”, subrayó la Cámara del Libro.
En ese contexto, remarcó que en las seis rondas anteriores el ATP ha sido “una herramienta fundamental para el sector del libro y para el mantenimiento del empleo”. Según una encuesta realizada por la Cámara Argentina del Libro, entidad que reúne a las micro y pequeñas empresas del sector, el 80% de los entrevistados accedió a este beneficio y más del 50% considera que, sin el salario complementario, no podría afrontar las obligaciones salariales el próximo mes y, el resto, que lo haría con mucha dificultad .
“El salario complementario del ATP fue uno de los pocos beneficios al que estos pequeños empresarios pudieron acceder para sostener (no sin dificultades) las fuentes laborales. 'De no ser por el ATP, estaríamos dejando a 17 familias en la calle:, explicó uno de los libreros entrevistados, que señala que, a pesar de las tempranas habilitaciones para abrir el local, sus ventas han bajado un 60%”, concluyó el comunicado de la entidad, firmado por su presidente Martín Gremmelspacher.
