La expansión de las exportaciones de China con relación al año pasado se desaceleró de 14,1% en marzo a 3,9% en abril. Se trata del crecimiento más bajo desde junio de 2020.
Por su parte, las importaciones no mostraron variación porque solo declinaron 0,1%.
Los destinos hacia el que más cayeron las exportaciones fueron Rusia, Alemania y Japón mientras que subieron 9,4% las ventas a Estados Unidos. En diciembre del año pasado las exportaciones llegaron a US$ 340.400 millones mientras que en abril fueron de US$ 273.600 millones.
Los magros resultados son consecuencia de las medidas restrictivas que se adoptaron para enfrentar la pandemia y que afectaron a varias actividades.
La dinámica del sector exportador ha sido clave en el crecimiento de China en los últimos años y en la medida en que se desacelere se complicará con el objetivo del Gobierno que es lograr un crecimiento de 5,5% del PIB este año.
La reacción de los mercados fue la previsible con una caída del yuan y de casi todas las demás monedas frente al dólar que sigue fortaleciéndose.
Por otra parte, la debilidad de las exportaciones de China genera tensión sobre la inflación global.