Continúa la polémica en Israel en torno a la reforma judicial impulsada por el primer ministro Benjamin Netanyahu: la Corte Suprema de Israel dijo el miércoles que escuchará una apelación contra una nueva ley que restringe algunos de sus propios poderes.
Así, una audiencia para la apelación quedó pautada para septiembre, mientras los críticos de la reforma siguen advirtiendo que los cambios podrían alentar la corrupción y los abusos de poder al eliminar la supervisión efectiva de la autoridad del Ejecutivo.
La coalición nacionalista-religiosa de Netanyahu aprobó el lunes una ley para limitar algunos de los poderes de la Corte Suprema.
Este representó la primera ratificación de un proyecto de ley que forma parte de los cambios en el Poder Judicial que, según Netanyahu, son necesarios para equilibrar los poderes y evitar que la Corte Suprema se extralimite.
La polémica reforma mantiene extremadamente divida a la sociedad israelí y, en los últimos meses, semanalmente se han registrado importantes manifestaciones en contra de Netanyahu, mientras que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, le ha mostrado su "preocupación" y le ha pedido que "no se apresure".
Según las últimas encuestas, si se celebraran elecciones ahora, el número de escaños ocupados por la coalición gobernante extrema derecha en la Knesset (parlamento) se reduciría de 64 a 52 o 53. Los escaños ocupados por el partido Likud de Netanyahu caerían de 32 a 28.
