La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, anunció que impulsará la apertura de relaciones "oficiales" con China, una iniciativa que complica aún más la situación de Taiwán.
"He instruido al canciller Eduardo Reina para que gestione la apertura de relaciones oficiales con la República Popular China", escribió Castro en su cuenta de Twitter, sin precisar si ello implicará una ruptura de los tradicionales lazos con Taiwán.
Además, la mandataria explicó que esto era una muestra de su determinación para llevar a cabo su plan de gobierno de expansión de fronteras: "Buscaremos establecer las más cordiales y amistosas relaciones diplomáticas con la República Popular China y con las comunidades de países asiáticos y africanos que quieran relacionarse con nosotros".
Tras conocerse la noticia, el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que el país realizó "la pertinente declaración de la parte hondureña (...) China está dispuesta a desarrollar relaciones amistosas y de cooperación con Honduras y otros países del mundo, sobre la base del principio de una sola China".
Justamente, una de las grandes cuestiones es si esto implicará que Honduras rompa sus vínculos diplomáticos con Taiwán, país considerado una provincia rebelde por parte de Pekín.
Desde la Cancillería taiwanesa urgieron a Tegucigalpa a "considerar cuidadosamente y no caer en la trampa de China y tomar la decisión errónea que dañará la larga amistad entre Taiwán y Honduras".
"El verdadero objetivo de las promesas falsas y atractivas del régimen dictatorial chino es llevarse nuestros aliados diplomáticos, y suprimir el espacio internacional de Taiwán", agregó.
Actualmente, Taiwán mantiene vínculos diplomáticos con 14 países, entre los que se encuentran Honduras, Guatemala, Paraguay y Haití.
