Donald Trump se acerca cada vez más a la nominación republicana: el magnate arrasó en el caucus de Nevada con el 99,1 % de los votos.
Trump fue el único candidato de peso, ya que sus únicos rivales eran Ron DeSantis, el gobernador de Florida, quien ya renunció a su candidatura, y Ryan Binkley, un pastor de Texas, que obtuvo 540 votos, el 0,9 %.
Así, Trump sumó su tercera victoria, tras las obtenidas en Iowa y New Hampshire, y 26 delegados, acercándose un poco más a los 1.215 que necesita para asegurar formalmente la nominación del Partido Republicano.
Por el momento, Nikki Haley es la única candidata de peso que compite con Trump, aunque no pudo presentarse en el caucus de Nevada, ya que el martes se presentó en las primarias.
Por una cuestión legal, Nevada celebró primarias y un caucus, aunque fue este último el que otorgó delegados. Los candidatos solo podían presentarse a una de las dos contiendas.
Además, ese martes, Haley sufrió una humillante derrota, ya que acabó por detrás de la opción "ninguno de estos candidatos".
Ahora, Trump apunta todos sus cañones a Carolina del Sur, en donde Haley fue gobernadora, ya que considera que, si obtiene el triunfo, prácticamente obligaría a su rival a abandonar la carrera. Sin embargo, formalmente hablando, Trump podría obtener los 1.215 delegados recién en marzo.
