En plena ola polar, una decisión del Gobierno nacional puede generar que se dispare el precio de la garrafa.
A partir de ahora, la Secretaría de Energía publicará valores de referencia, pero no habrá precios máximos, por lo que se podrán fijar libremente sin tener que adecuarse a un tope. Así quedó establecido mediante la Resolución 216/2024 publicada ayer lunes en el Boletín Oficial.
Como era de esperar, la medida dispuesta por la Secretaría de Energía tuvo una importante repercusión a nivel industrial y empresarial.
Con más de 30 fraccionadores y cientos de distribuidores el mercado de GLP hoy opera en un contexto de alta competencia. Desde la industria explican que la materia prima para este sector subió un 80% y el último incremento de precios se había otorgado en enero de este año.
Consultado por este medio, el presidente de CEGLA, Pedro Cascales, considera que ante la situación económica imperante en el país, el acomodamiento de precios se dará de manera gradual.
"No creo que el aumento de precios sea significativo: hay mucha oferta y demanda en el mercado. Estamos convencidos de que la desregulación de precios del gas envasado permitirá el desarrollo de mayores inversiones", aseveró.
El incremento tiene como principal encuadre lo aprobado en la Ley Bases, donde se dejó explícito que el Poder Ejecutivo no puede interferir en los precios de los combustibles e hidrocarburos en general.
La medida está en sintonía con el DNU 70/2023 en el que se estableció "como objetivo de política nacional el funcionamiento libre de los mercados energéticos en todos sus alcances", por lo que en relación al GLP se determinó que "los criterios normativos vinculados al sector deben armonizarse con los objetivos de política nacional que habrán de regir el sector energético en su integralidad".
"Sin restricciones de precios en el GLP las inversiones deberían prosperar", apunta Cascales y anticipa que "hacia adelante se espera que el mercado vaya a una mayor competencia, sin topes sobre los precios de los productores y se tienda a ir a un escenario de paridad de precios internacionales como ocurre en los países desarrollados donde el Estado no interviene en la regulación de precios, y el mercado se rige por la oferta y la demanda según la zona, las distancias y los costos reales".
La misma Resolución 216/2024 señala que "la desregulación del mercado de precios de GLP, producirá una mayor eficiencia en lo económico y estimulará la inversión, produciendo de esta forma una mejora progresiva en cuanto a una amplia competencia logrando elevar al mercado de GLP local a estándares internacionales".
La cartera conducida actualmente por Eduardo Rodríguez Chirillo publicará a partir de ahora valores de referencia: la garrafa de 10 kilos costará $ 8.500; la de 12 kilos $ 10.200 y la de 15 kilos quedará en $ 12.750.
El GLP es la mezcla de gases licuados presentes en el gas natural o disueltos en el petróleo, los cuales son la base para su obtención. Los componentes del GLP, aunque a temperatura y presión ambientales son gases, son fáciles de licuar. Se puede decir que es una mezcla de propano y butano.
Estos gases se comercializan por separado, aunque en realidad siempre es una mezcla de los dos. Normalmente el butano se distribuye en garrafas y el propano en tanques de granel, para abastecer depósitos situados en el terreno (enterrados o no), aunque también se vende en cilindros de 45 kg. de capacidad. Además se caracterizan por tener un poder calorífico alto.
