En mayo, volvió a caer el empleo registrado (SIPA). En comparación con noviembre ya son 175.746 asalariados formales que perdieron su puesto de trabajo.
El retroceso del empleo en estos seis meses se explica por una caída del 1,9% en los asalariados del sector privado (123.123 trabajadores), del 1,1% en el sector público (36.940 trabajadores) y del 3,4% en casas particulares (15.683 trabajadoras). Los datos fueron publicados por la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social y procesados por Luis A. Campos, Investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA - Autónoma.
Por el lado del sector privado, ya son 9 meses de caída ininterrumpida. Contra agosto de 2023 ya perdieron su puesto 156.224 trabajadores. En términos absolutos estamos en niveles similares a los de mediados de 2015.
La construcción ayudó a frenar el desplome
"La única noticia no tan mala es que el ritmo de destrucción del empleo registrado aflojó bastante y fue el menor de los últimos 6 meses", dice Campos. En gran medida ello se debe a que dejó de desplomarse la ocupación en la construcción.
El cambio en la dinámica del empleo formal en la construcción fue clave en mayo. Cayó "apenas" 0,3%, un ritmo muy inferior al de los meses anteriores. "La recuperación en el corto plazo podría venir por aquí, si es que se da", dice Campos.
Ahora, la alerta es la industria
El foco de la preocupación ahora está en la industria manufacturera. Mayo fue el tercer mes consecutivo con caídas en torno al 0,4%. Contra noviembre de 2023 ya se perdieron 22.750 puestos de trabajo.
El gráfico habla por sí solo.
Hubo ganadores
"En estos 6 meses también hubo ganadores", dice Campos. El empleo registrado creció fuerte en pesca (8,8%), agricultura y ganadería (3,2%) y minería (1%). "Por ahora no compensa la caída en el resto, pero el sector primario es claramente el único que se salva de la crisis", dice.
Por provincias, prima la heterogeneidad
A nivel geográfico la heterogeneidad es la regla. En comparación con noviembre algunas provincias perdieron casi el 10% del empleo registrado (Formosa, Tierra del Fuego, La Rioja), mientras que en otras hubo un crecimiento relativamente importante (Salta, Chubut)
Por el lado del empleo público, en mayo se perdieron casi 8.845 puestos de trabajo y se acumulan 36.940 trabajadores menos desde noviembre de 2023. "Si incluyéramos las modalidades contractuales no asalariadas seguramente la caída sería mayor", detalló Campos.
Las trabajadoras en casas particulares siguen siendo las más afectadas
Las trabajadoras en casas particulares siguen siendo las más afectadas por el deterioro del mercado formal de fuerza de trabajo. Ya no hay piso para el sector. La caída es ininterrumpida desde principios de 2020. Desde entonces se perdieron 52.743 puestos de trabajo (10,5%).
El salario real mejora lentamente
El salario real del sector privado registrado volvió a crecer en mayo (SIPA) y sigue recortando la caída de fin de año. Contra noviembre de 2023 está 4,7% abajo. En el mediano plazo, todavía está en valores muy deprimidos (cerca de 20% menos que en 2017), dice Campos en un hilo en X.
El empleo en junio
El empleo registrado habría vuelto caer en junio. La EIL da cuenta de un retroceso del 0,2% mensual. "En este caso también se va morigerando el ritmo de deterioro desde los máximos de marzo", dice Campos y proyecta, a modo de interrogante: "Veremos si en algún momento rebota".
Fuerte suba de las suspensiones
"Las que subieron fuerte fueron las suspensiones", dice Campos. En junio alcanzaron al 10,4 por 1,000 de trabajadores, valores que están cerca de los máximos de la serie (iniciada en 2006) excluyendo la pandemia.
El futuro del empleo en la Argentina de Milei
Para lo que viene, dice Campos, "no sería raro que estemos encontrando un piso". "En algún momento la destrucción de puestos de trabajo tiene que parar. La pregunta es si el empleo en algún momento podrá volver a crecer y sostenerse en el tiempo. Por ahora, esta inquietud es ciencia ficción", dice Campos.
