El informe Focus, que publica semanalmente el Banco Central de Brasil con la mediana de las proyecciones económicas de los analistas del mercado, muestra tendencias muy estables. La suba estimada del Indice de Precios al Consumidor volvió a corregirse al alza y pasó de 3,25% a 3,45%, medio punto más que lo esperado hace cuatro semanas. Para 2021, los analistas prevén una inflación de 3,40% por lo cual se ubicaría por debajo de la meta del BC que es de 4%.
En materia cambiaria, el mercado apuesta por una revaluación del real en un contexto de debilidad global de la moneda estadunidense. La estimación es que el dólar se cotice a 5,38 reales a fin de año, apenas por encima de su valor actual, y a 5,20 al cierre de 2021. Para la tasa Selic, ahora se proyecta una suba de un punto el año que viene por lo cual pasaría del actual 2% al 3%.
También los pronósticos de actividad mantuvieron las tendencias recientes y la caída del PIB en 2020 se ajustó de 4,66% a 4,55%, la mitad de lo que preveía el FMI a mitad de año, mientras que la expansión estimada para 2021 mejoró de 3,31% a 3,40%. En el plano de la producción industrial, la contracción de este año se redujo de 5,34% a 5,04% mientras que el crecimiento esperado para 2021 se aceleró de 3,72% a 4,53%.
Por su parte, el desequilibrio de la cuenta corriente que en 2020 sería de US$ 3.800 millones en 2020, treparía a US$ 18.500 millones en 2021 mientras que el superávit comercial descendería de US$ 55.700 millones a US$ 55.100 millones. El frente fiscal mostraría el año que viene un fuerte cambio de la mano de la normalización de la economía y el déficit primario pasaría e 11,8% del PIB al 3% y el nominal de 15,5% a 6,6%.
Un escenario de expansión de la actividad con apreciación cambiaria es favorable para aquellos países que tienen un intenso intercambio comercial con Brasil.
