El escándalo en Vélez que involucra a los jugadores Sebastián Sosa, Braian Cufré, José Florentín y Abiel Osorio, quienes fueron acusados por abuso sexual en Tucumán, sumó un nuevo capítulo en las últimas horas. A poco tiempo de conocerse la denuncia, se filtraron los chats entre el arquero uruguayo y la denunciante, contenido que complica aún más a algunos de los imputados.
La Justicia, que le prohibió salir del país a los implicados, evalúa nuevas pruebas vinculadas a los mensajes previos y posteriores al presunto abuso, mientras que se espera la declaración la víctima en Cámara Gesell para el próximo lunes.
La mujer de 24 años reveló dichas pruebas, donde se detalla una conversación fluida con Sosa, pero lo llamativo es que dialogan sobre "la pastilla del día después".
El arquero de Vélez le señala a la joven periodista la importancia de que la tome, puesto que el jugador que presuntamente abusó de ella no había utilizado preservativo: "No está seguro de haberlo usado en todo momento".
Allí, la joven desliga de responsabilidad a Sosa y denuncia lo ocurrido con los otros tres futbolistas: "Está bien, Seba, vos no hiciste nada. No te voy a hacer cargo de lo que no te corresponde (...) Lo odio, se fue a la mierda, eso no se le hace a ninguna mujer, nunca (...) Sé como soy, conozco mis límites y sé que ayer los puse y ni él ni el otro pararon".
"Estaba totalmente perdida, me levanté y me cayó sangre por los tobillos, tuve que ducharme", relató la denunciante de aquel 3 de marzo pasado en el hotel Hilton, donde estuvo alojado el plantel de Vélez para su partido frente a Atlético Tucumán.
El presunto hecho habría ocurrido alrededor de las 22, la joven recibió la invitación a través de Instagram por parte de Sosa para que se presentara en el Hilton.
Según lo expuesto por la periodista, ella aceptó y fue al lugar donde llegó a las 00.40 aproximadamente. Cuando subió a la habitación, donde ya la estaba esperando el arquero, al ingresar observó que también se encontraban los jugadores Cufré, Osorio y el paraguayo Florentín, con los cuales compartió unas latas de cerveza, luego fernet y, después de tomar unos tragos, comenzó a sentirse muy mareada y entonces ocurrió el abuso sexual.
En el desarrollo de la investigación, nuevos elementos surgieron, entre ellos la posible inconsciencia del arquero durante el presunto abuso sexual y su preocupación posterior por el estado de la denunciante. Este hecho complica la situación de sus compañeros, quienes habrían sido señalados por la víctima como partícipes activos en el supuesto acto.
Asimismo, la fiscalía decidió acusar a Sosa como partícipe secundario y a los otros tres jugadores por abuso sexual agravado, debido a la participación de más de dos personas.
