La industria automotriz brasileña le pide a Lula que suba los impuestos a los eléctricos importados
Las alarmas ante la llegada masiva de autos eléctricos chinos se encendieron en varios países y Brasil no es la excepción. Luego de que EE.UU. incrementara los aranceles y que la Unión Europea planteara una postura similar, ahora la industria automotriz de nuestro vecino es la primera en hacer un llamado al Gobierno de Lula Da Silva.
ANFAVEA (Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores) es la entidad que agrupa a las terminales que fabrican autos en Brasil (la homóloga a ADEFA en Argentina), y en las últimas horas, su presidente Márcio de Lima Leite expresó públicamente su preocupación.
"Seguimos siendo rehenes de las importaciones. Atacan nuestra competitividad, ahora y en el futuro. Si Brasil quiere mirar hacia adelante, ser un gran competidor, debemos analizar las importaciones con un sesgo de preocupación. Con este volumen creciente hoy es un riesgo para nuestra industria", dijo el ejecutivo en el marco del Seminario AutoData Revisiones de Perspectivas 2024.
Concretamente Lima Leite pidió que se suban de una vez los aranceles a los autos eléctricos importados, algo que ya estaba previsto de manera escalonada. Es que ANFAVEA analiza lo que ya está pasando y lo que puede suceder con un aumento sustancial de las importaciones: ya es de 38% en los primeros cinco meses del año respecto al mismo período de 2023, y China contribuyó con el 82%, en particular con el fenómeno de BYD.
"Estamos viviendo el momento más crítico en nuestra industria. Brasil aún no ha recuperado su arancel de importación, aunque ha dado un paso muy importante para generar un equilibrio entre la producción local y el volumen de importaciones", sostuvo.
¿Cómo es el esquema impositivo para electrificados en Brasil?
El año pasado, el Gobierno de Brasil decidió -a partir de enero pasado- reimponer aranceles a la importación a todo tipo de vehículos electrificados, diferenciándolos según su tipo: 100% eléctricos, híbridos enchufables e híbridos.
En el caso de los puro eléctricos, la tasa pasó de 0 al 10%, y se llevará al 18% en julio, al 25% en julio de 2025 y al 35% en julio de 2026. Para los híbridos ya es del 12% desde enero, psará al 25% el mes que viene, al 30% en julio de 2025 y llegará a 35% en julio de 2026. Y en el caso de los híbridos enchufables la secuencia ya es de 12% desde principios de año, irá a 20% en julio, a 28% en julio del año próximo y a 35% en julio de 2026.
A la luz del poderío demostrado por BYD, que en mayo llegó con barco propio al puerto de Suape, en Pernambuco para desembarcar 5.549 autos (entre híbridos y eléctricos), ANFAVEA pide revisar esa planificación ya acordada e ir de una vez hacia el 35%.
"Si es mejor traer de China que producir en Brasil, lo harán, porque es negocio. Si tienes un mercado abierto como el nuestro, si el arancel no es suficiente para detener las importaciones, es necesario repensar este arancel. Brasil perderá fabricantes y sólo quedarán los recién llegados. Necesitamos dar este paso: anticiparnos al arancel. Esta es la primera vez que hablamos de esto. Anfavea propone repensar el tipo impositivo a las importaciones", indicó Lima Leite.
El pedido llega en un año en el que Brasil recibió también un aluvión de inversiones tanto de terminales ya radicadas e históricas, si cabe el término, como de nuevas que hasta ahora eran importadoras.
Tal es el caso de la propia BYD (que adquirió las instalaciones que eran de Ford, en Bahía) y de Great Wall Motors (que fabricará una pick-up híbrida en la planta de Iracemápolis que fue de Mercedes-Benz).
ANFAVEA los quiere fabricando localmente como hace Toyota, que ya fabrica dos modelos híbridos: Corolla y Corolla Cross. No obstante, esta medida de subir impuestos no sólo afectará a las marcas chinas sino que acabará por pegarle indirectamente a sus propios asociados.
El caso concreto es el de Stellantis -dueño de Fiat, Peugeot, Citroën, Jeep y RAM, entre otras- que ya anunció que traerá este mismo año a la región los modelos eléctricos de la marca china Leapmotor (ver acá).
"Gracias a nuestra presencia global existente, pronto podremos ofrecer a nuestros clientes vehículos eléctricos centrados en la tecnología con precios competitivos que superarán sus expectativas", declaró Carlos Tavares, director general de Stellantis.
¿Cómo es el esquema en Argentina? La situación es similar debido a que -como comentamos acá- existía un esquema de beneficios arancelarios y un cupo que no se renueva desde el año pasado, por lo cual hoy los electrificados que llegan por fuera del Mercosur pagan el 35% como cualquier otro importado.
¿Cuánto vendieron los importadores este año en Brasil?
Según las cifras provistas por ABEIFA (Asociación Brasilera de Empresas Importadoras y Fabricantes de Vehículos Automotores), en los primeros cinco meses del año se patentaron 37.092 autos importados de los cuales 27.236 (más del 73%) correspondieron sólo a BYD.
Este jueves, la entidad salió al cruce del pedido que ANFAVEA le hizo al Gobierno y reclamó "previsibilidad en las políticas industriales del sector automotor brasileño" y "respeto a los consumidores que tienen derecho a acceder y elegir tecnologías de punta".
¿Qué decisión tomará Lula? Aún no se sabe. Mientras tanto, y a pesar de este entuerto, ANFAVEA mantiene sus proyecciones para 2024, en las que prevé un crecimiento de 6,1% de las ventas de autos, alcanzando las 2.450.000 unidades, un incremento de 0,7% en las exportaciones con el envío de 407 mil vehículos, así como una aumento de 6,2% en la producción, que rondaría las 2.470.000 unidades.