Los 10 gobernadores de JxC se reunieron este miércoles en la Casa de Mendoza, en la Ciudad de Buenos Aires, para analizar el panorama político y unificar posturas luego del triunfo de Javier Milei, líder de La Libertad Avanza, en el balotaje.
Se comprometieron a "garantizar la gobernabilidad" del próximo Presidente y prometieron actuar con "responsabilidad institucional", aunque al mismo tiempo exigieron una compensación "urgente" sobre la decisión que había tomado el ministro de Economía, Sergio Massa, respecto a la quita del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría.
En el encuentro participaron el anfitrión Alfredo Cornejo (Mendoza), Gustavo Valdés (Corrientes), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy) acompañado por Gerardo Morales, el mandatario saliente; Leandro Zdero (Chaco), Marcelo Orrego (San Juan), Jorge Macri (CABA), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), y Claudio Poggi (San Luis). Pese a los rumores que circularon en la previa, no participaron en la reunión ni Milei ni ningún emisario de su equipo.
El poder provincial
JxC sufrió una fractura a nivel partidario dado que a partir del 10 de diciembre el PRO será oficialista y la UCR opositora. Es inviable que pertenezcan a la misma coalición. En el plano legislativo tampoco cabe esperar un interbloque estable como en los últimos años sino que se analizarán caso por caso las distintas propuestas del Gobierno.
Distinta es la situación de los gobernadores que afirmaron que los bloques legislativos de JxC serán "determinantes en la próxima gestión nacional" de Milei y manifestaron su compromiso a "trabajar en conjunto con los representantes de nuestras fuerzas en el Congreso" para articular "una estrategia política común".
Teniendo en cuenta la falta de respaldo legislativo de Milei, aseguraron que "las reformas tienen que tener consenso político, y el consenso hay que construirlo y conversarlo".
Pero el poder provincial, concentrado en las figuras cambiemitas, debe superar las rispideces dadas durante la campaña y enfrentar la próxima gestión.
El encuentro del miércoles le permitió a JxC obtener una foto que muestre una coalición consolidada frente al poder del presidente electo. Los niveles provincial y nacional se necesitan mutuamente para avanzar en las reformas pretendidas y lograr una buena administración.
JxC no solo busca poner en evidencia que aún constituye un polo de poder en el escenario político, sino que también necesita lograr el consenso interno. En la mayoría de las provincias, las fórmulas que ganaron tuvieron una integración entre la UCR y el PRO, así como también hubo listas compartidas para las legislaturas locales. Por eso, la unidad del espacio es fundamental de cara al próximo mandato para los gobernadores. Su prioridad es consolidarse en la gestión provincial sobre todos en aquellos casos en los desplazaron al peronismo del poder, siendo Santa Fe y Entre Ríos los distritos más emblemáticos.
Así, los mandatarios manifestaron "su compromiso con el cambio y la gobernabilidad del país", y prometieron contribuir a la "paz social", al tiempo que advirtieron sobre sus intenciones de "influir en el rumbo del país".
