Una particularidad del sistema político argentino es que los partidos no tienen una posición orgánica frente al tema de la interrupción voluntaria del embarazo y permiten, que por considerar que se trata de una cuestión de conciencia, cada legislador pueda votar de acuerdo a sus convicciones. Se trata de una deficiencia, dado que en un tema tan sensible, los partidos deberían decirles a la sociedad donde están parados.
De todas maneras, en la votación de Diputados, los alineamientos quedaron bastante claros. El 70% de los diputados del Frente de Todos (82) votaron a favor del IVE mientras que el 27% (32) lo hizo en contra. En el caso de la UCR, el 57% (27) votó afirmativamente y el 39% (18) lo hizo por la negativa. Un dato curioso es que el presidente del partido, Alfredo Cornejo, se abstuvo. Esos números se invierten en el caso del PRO en donde predominaron los rechazos porque el 77% de sus legisladores (40) votó en contra del proyecto mientras que el 21% (11) que se expresó a favor. En el caso de la Coalición Cívica, hubo 4 votos afirmativos y 9 negativos.
También se observaron sesgos por provincias. En Buenos Aires y la CABA, por ejemplo, predominó el voto verde, y en menor medida en Santa Fe, mientras que en Córdoba lo hizo el celeste.
