El 2024 no ha comenzado de buena manera para Boeing: este lunes, sus acciones cayeron 6,9% tras la suspensión temporal de algunos de sus aviones 737 MAX por parte del regulador de aviación de Estados Unidos.
La semana pasada, un trozo del fuselaje de un 737 MAX 9 de Alaska Airlines se desprendió luego de despegar de Portland (Oregón), obligando a los pilotos a regresar al aeropuerto.
Aunque los 177 pasajeros y la tripulación no sufrieron ninguna lesión de gravedad, la Administración Federal de Aviación de EE.UU. (FAA) ordenó "inspecciones inmediatas" de 171 aviones Boeing 737 Max 9.
Según los analistas, el accidente parecía ser un problema puntual de fabricación, más que un problema de diseño, que sería mucho más costoso de solucionar.
Sin embargo, la noticia es desalentadora en cuanto a que los modelos Boeing 737 MAX 8 tuvieron dos accidentes fatales en 2018 y 2019 que ocasionaron la muerte de casi 350 personas y provocaron que el modelo estuviera en tierra en todo el mundo durante 20 meses.
Así, pese a que estamos hablando de otro modelo, el historial del MAX sigue sumando problemas y, como era de esperar, mientras las acciones de Boeing caían, las de su competidor europeo Airbus subieron 2,7%.
