Juscelino Filho, ministro de Comunicaciones de Brasil, se convirtió formalmente en el primer ministro del tercer mandato de Lula da Silva en ser culpado de corrupción: la Policía Federal lo acusó formalmente de corrupción pasiva y otros delitos.
La policía investigó a Filho en una pesquisa de presunta corrupción en Codevasf, una agencia de desarrollo vinculada al gobierno para la región de São Francisco y Parnaíba, en el noreste de Brasil.
Como era de esperar, Filho negó las acusaciones y calificó la investigación de la Policía Federal como una persecución política.
Específicamente, fue acusado de aceptar sobornos, lavar dinero y participar en una organización criminal, lo que podría derivar en que se enfrente a cargos penales.
Filho ha estado sirviendo en el gabinete de Lula desde que el líder del PT asumió el cargo en enero de 2023 para su tercer mandato.
El Ministro ya había sido noticia a principios de 2023 cuando, presuntamente, utilizó un avión de la Fuerza Aérea para viajar a una subasta de caballos.
