Aunque aún falta la confirmación oficial, Israel, Estados Unidos y Hamás habrían llegado a un acuerdo tentativo para liberar a decenas de mujeres y niños retenidos como rehenes en la Franja de Gaza a cambio de una pausa de cinco días en los combates.
Según lo pautado, todas las partes congelarían las operaciones de combate durante al menos cinco días, mientras que "50 o más rehenes iniciales son liberados en grupos más pequeños cada 24 horas".
Se estima que el grupo terrorista Hamás tomó alrededor de 240 rehenes, cuando atacó Israel el pasado el 7 de octubre, y asesinó a 1.200 personas.
Pero, más allá del acuerdo a corto plazo, el gran temor de la comunidad internacional es que la guerra en la Franja de Gaza se prolongue indefinidamente.
Justamente, pensando más a largo plazo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que la Autoridad Palestina debería en última instancia gobernar la Franja de Gaza y Cisjordania tras la guerra entre Israel y Hamás.
"Mientras luchamos por la paz, Gaza y Cisjordania deberían reunirse bajo una única estructura de gobierno, en última instancia bajo una Autoridad Palestina revitalizada, mientras todos trabajamos hacia una solución de dos Estados", dijo Biden.
"No debe haber desplazamiento forzoso de palestinos de Gaza, ni reocupación, ni asedio o bloqueo, ni reducción del territorio", agregó.
Sin embargo, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, discrepó con el plan de Biden para que la Autoridad Palestina gobierne Gaza: "Creo que la AP en su forma actual no es capaz de aceptar la responsabilidad de Gaza después de haber luchado y hecho todo esto, para pasársela a ellos".
Hace algunos días, Netanyahu dijo que Israel debe mantener la "responsabilidad militar general" en Gaza "en el futuro previsible", lo que ha generado el temor de que invada dicha región.
Israel ocupó la Franja de Gaza hasta 2005, mientras que la Autoridad Palestina solía gobernar tanto en Cisjordania como en Gaza, pero fue expulsada de esta última en 2007 luego de una breve guerra civil con Hamás.
