Este jueves, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, se presentó ante la Asamblea General de su país para informar los lineamientos para su gobierno en el 2023.
Entre los anuncios más importantes se destacó una significativa rebaja de impuestos que incluye las reducciones de alícuotas en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y en el Impuesto a la Asistencia de la Seguridad Social (IASS).
Sin embargo, el mandatario no evitó las críticas, ya que los impuestos que serán rebajados los pagan mayoritariamente el 25% de la sociedad con mayores ingresos.
Pero, durante su discurso, Lacalle Pou se refirió al IRPF y al IASS, y señaló que la baja impositiva impactará en las personas de menos ingresos y los que tienen hijos.
"Se va a aumentar la deducción del 10% al 14% a aquellas personas con ingresos menores y se va a aumentar la deducción por hijo de 13 BPC (Base de Prestaciones y Contribuciones) a 20 BPC, manteniendo la duplicación en caso de hijos con discapacidad", agregó.
En este sentido, explicó que "estos cambios en la deducción del IRPF van a beneficiar al 75% de los contribuyentes, mientras el 14%, cerca de 63.000 uruguayos (aquellos de menores ingresos) van a dejar de pagar el IRPF".
Respecto al IASS, dijo que se aumentará el mínimo no imponible de 8 a 9 BPC y el crédito por arrendamiento de 6 a 8 BPC y que, con ello, 20.000 jubilados dejarán de pagarlo.
Por otra parte, el mandatario, que está impulsando un tratado de libre comercio con China, también se refirió al Mercosur y nuevamente reiteró que "no podemos quedar rehenes de la inmovilidad" del bloque.
"El Mercosur es una de las zonas más proteccionistas del mundo y eso no beneficia los intereses de los uruguayos (...) como prometimos en la campaña electoral, estamos haciendo todo lo posible para que Uruguay esté abierto al mundo y alcance a firmar acuerdos comerciales que nos faciliten el intercambio de nuestros bienes y servicios", sentenció.
