Los accionistas de la empresa estatal brasileña Eletrobras aprobaron 12 artículos en una Asamblea General, incluida la privatización de la misma.
El artículo que habilitó la privatización fue aprobado por los poseedores de 202.617 millones de acciones ordinarias de la empresa, mientras que los accionistas representantes de 9.749 acciones se pronunciaron en contra y las abstenciones sumaron 884.482 millones de votos.
Según el Gobierno de Jair Bolsonaro, la privatización se llevará a cabo a través de una oferta de acciones a mediados de 2022 y las mismas se venderán tanto en el mercado de valores Bovespa de Brasil como en Estados Unidos.
La idea es que la capitalización de la compañía se realice a través de un aumento de capital. Se emitirán nuevas acciones y el Estado renunciará a su derecho de suscripción. Así, reduciría su participación en la empresa hasta el 45% desde el 72,33% actual.
La privatización de Eletrobras, que fue aprobada por el Congreso de Brasil a mediados del año pasado, ha sido impulsada, principalmente, por el ministro de Economía Paulo Guedes.
Justamente, esta semana Guedes había reconocido que subestimó “la resistencia del establishment” y que las privatizaciones se vieron demoradas por la falta de apoyo político.
Por su parte, Lula da Silva, el máximo candidato para las elecciones presidenciales de octubre, dijo que "vender Eletrobras por lo que cuestan las bananas significa vender un activo estatal y aumentar el desempleo”.
“Les diría a los inversores que lo piensen dos veces antes de comprar Eletrobras", agregó.
No será fácil avanzar con el proceso de venta en un año electoral. Aun así, Guedes intentará.
