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La “guerra” contra la inflación era hace 15 años

"Con la inflación no se convive: la matás o te mata", suele decir Ricardo Arriazu

La “guerra” contra la inflación era hace 15 años
La “guerra” contra la inflación era hace 15 años
Alejandro Radonjic 15 marzo de 2022

En Argentina, cuando la inflación está en la zona de 2% o 3% mensual, hay siga siga para la dirigencia política, que es la que define la política económica en general, y antiinflacionaria en particular. Venimos bien, nada de qué preocuparse. 

Contexto: ver qué ocurre, hoy mismo, en países que tienen registros mensuales que son la mitad o una tercera parte de eso. 

Cuando la inflación mensual está arriba de 3% y se acerca a 4%, ya es un problema un poco más serio. Se habla más del tema, se dicen algunas cosas y se prenden algunas alarmas, pero no suelen haber cambios (gestuales ni reales) después. Se apretan los dientes hasta la llegada del próximo IPC. 

Cuando el IPC está bien arriba de 4%, como el que entregó hoy el Indec (4,7%) y con alimentos ariba de 7%, es un baldazo de agua fría. “Che, algo hay que hacer”. Pero es imposible entender esta última reacción sin las primeras dos. "Con la inflación no se convive, la matás o te mata", suele decir Ricardo Arriazu. 

En criollo, la “guerra” que planteará el Gobierno desde el viernes llega 15 años más tarde. Ahora, en ausencia de shocks, tipo Convertibilidad, que vendría a ser la guerra, la estrategia debe ser la de batallas parciales, pero con consistencia. Hay inflación para largo rato…pero si es a la baja, mejor.

Desde que volvió la inflación a Argentina hasta 2018, el “modelo inflacionario” del 2% funcionaba. A nadie le gusta una inflación en la zona  de 25-30% y había un problemón a la vista, pero siga siga. Y si, dentro de todo, la varianza mensual es baja, uno se acomoda. 

Ese modelo ya no corre más, porque hoy Argentina está en la zona de inflación de 50% mensual. Además, la varianza es más alta. Conviven meses de menos de 3% con otros de casi 5%. 

El uso de las anclas en 2021 (tarifas y otros regulados + dólar), que tampoco sirvió mucho (el IPC fue 50,9%), se tienen que empezar a levantar. Más por pedido del FMI que por convicción. Es el peor de los mundos. 

Ahora, Argentina parte hacia un reacomodamiento de los precios relativos regulados (incluye el dólar), en el contexto de una inflación global en alza con un rally sin precedentes en insumos básicos como el trigo, el gas o el petróleo, desde una inflación de 50%.  Si se hubiera actuado antes…

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Todo sobre la inflación

Hay inflación cuando se produce un aumento general y sostenido de los precios de la economía. No son aumentos puntuales de algún servicio o bien sino de casi todos y, además, que esas subas se sostienen en el tiempo.


Si bien se trata de un proceso complejo y "multicausal", el factor principal suele ser un desequilibrio fiscal que se financia con emisión monetaria o con endeudamiento no sostenible que termina en un repudio a la moneda y/o también una devaluación. Milton Friedman, padre del monetarismo, solía decir: "La inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario".

La inflación de Argentina está, hace varios años, entre las más altas del mundo. En 2022 fue de 94,8%, y casi duplicó a la de 2021 (50,1%). Fue la tasa más alta desde 1990. Las proyecciones para 2023 no son buenas y se espera que la inflación supere claramente el 100%.

Se dice que la inflación es un impuesto a los pobres porque son esos sectores los que tienen, por un lado, menos ahorros y, por el otro, menos capacidad de poder aumentar sus ingresos (vía paritarias, por ejemplo) ante la suba de precios. Por eso, cuando sube la inflación, los gobiernos tratan de proteger a los sectores de menores ingresos para que no caigan en la pobreza.

La inflación en Argentina es un problema complejo que tiene raíces profundas en la historia económica del país. Aquí hay algunas de las causas más comunes de la inflación en Argentina:

  1. Déficit fiscal. El gobierno argentino a menudo gasta más dinero del que recibe en forma de impuestos, lo que lleva a un déficit fiscal. Para financiar el déficit, el gobierno emite más dinero, lo que puede aumentar la inflación.

  2. Inestabilidad política y económica. La inestabilidad política y económica en Argentina a lo largo de los años ha contribuido a la incertidumbre en el mercado y ha llevado a la devaluación de la moneda nacional.

  3. Problemas en la gestión de la economía. La falta de medidas económicas coherentes y efectivas para controlar la inflación ha sido un problema persistente en Argentina.

  4. Déficit de la balanza comercial. Argentina a menudo importa más de lo que exporta, lo que puede aumentar la inflación al hacer que la moneda sea menos valiosa.

Estas son solo algunas de las causas de la inflación en Argentina. Es importante señalar que no existe una solución única o sencilla para resolver este problema complejo.

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