Kansas City Chiefs se consagró campeón del Super Bowl LVII (57) tras derrotar agónicamente a Philadelphia Eagles por 38-35, por la gran final de fútbol americano que tuvo lugar en el State Farm Stadium de la localidad de Glendale, en el estado de Arizona, y que en el entretiempo contó con el show de la cantante Rihanna. Este resultado permitió que la franquicia de Missouri se lleve una buena cantidad de dinero.
De acuerdo con el Collective Bargaining Agreement (contrato colectivo de trabajo), cada miembro de "Los Jefes" de Kansas recibió US$ 157.000, siete mil más que ganaron los Angeles Rams la temporada pasada, por ganar el Super Bowl.
A su vez, a dicha cifra hay que sumarle lo que fue ganando la franquicia de Missouri en los partidos de playoffs de Conferencia, que son alrededor de US$ 115.000 por jugador.
Además, los jugadores recibieron sus ansiados anillos de campeón con las siglas del Super Bowl, valorados entre US$ 5.000 y US$ 7.000.
Las "Aguilas, en cambio, se llevaron US$ 82.000 por cada jugador, también siete mil veces más que obtuvieron los Cincinnati Bengals el año pasado, por haber llegado a la gran final.
Los Kansas City Chiefs, uno de los dos equipos destacados de la temporada regular de la NFL, se coronó por tercera vez en la historia del Super Bowl luego de las consagraciones de 1969 y 2019. Pero en sus vitrinas también exhiben los tres campeonatos de la AFL ganados en 1962, 1966 y 1969.
