Por la favorable evolución del clima, especialmente las recurrentes lluvias a lo largo del ciclo del cultivo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires elevó la proyección de producción de soja a 54,5 millones de toneladas para la campaña 2019/2020. Eso significaría un incremento de 1,4 millones de toneladas respecto a la previsión anterior.
La mejora también abarca a la producción de maíz de la actual campaña, impulsada por muy buenas expectativas de rinde que elevaron la proyección a 50 millones de toneladas.
Por último, la cosecha de girasol (que ya registra un avance sobre el 36,2 % del área sembrada) haría que la producción de la actual campaña ronde los 3,4 millones de toneladas. Eso representa una mejora de 200.000 toneladas respecto al informe previo elaborado por la Bolsa de Cereales.
Según el último panorama semanal de la entidad porteña, el 68,5% de las 17,4 millones de hectáreas implantadas con soja se encuentra transitando etapas críticas para la definición del rendimiento bajo una condición hídrica entre óptima y adecuada.
“La favorable evolución climática, dada especialmente por las recurrentes precipitaciones a lo largo del ciclo del cultivo, permite elevar la proyección de producción a 54.500.000 toneladas. Esto representa un incremento de 1,4 millones de toneladas con respecto a la anterior publicación”, sostuvo la Bolsa porteña.
“No se descartan futuros aumentos dependiendo de la evolución del cultivo y las precipitaciones durante las próximas semanas”, agregó la entidad.
De ese modo, la nueva proyección realizada por la Bolsa de Cereales porteña deja sentada la posibilidad de una producción mayor de la oleaginosa para la actual campaña.
Así informó la entidad, en momentos en los que el Gobierno analiza la posibilidad de incrementar 3 puntos porcentuales la alícuota de los derechos de exportación, de 30% a 33%, algo que es rechazado por el sector agropecuario.
De cumplirse la proyección, la producción de soja de la actual campaña se ubicará sólo 1,5 millones de toneladas por debajo de la de la temporada 2018-2019, cuando alcanzó las 56 millones de toneladas.
En lo que respecta al maíz, la cosecha con destino grano comercial ya se ubica en el 1% de las 6,3 millones de hactáreas sembradas durante la actual campaña.
En este marco, “las muy buenas expectativas de rinde de los planteos tempranos y tardíos permiten también elevar la proyección de producción a 50 millones de toneladas para la campaña 2019/20, un volumen que se mantiene 1,6% por debajo del total recolectado en el ciclo previo (50,6 millones de toneladas)”, precisó la Bolsa de Cereales.
Mientras tanto, la cosecha de girasol ya avanzó sobre el 36,2 % del área apta, marcando una demora de 4,9 puntos porcentuales respecto a igual período anterior, pero con un rinde promedio nacional que se mantiene en 21,2 quintales por hectárea.
“En los últimos días se ha iniciado la recolección de los primeros lotes en el sur del área agrícola, arrojando rindes que superan las expectativas iniciales, tal como se había pronosticado en informes previos. En cuanto al área en pie, más de la mitad de los lotes ya alcanzó la madurez y, de acuerdo a nuestros registros, las expectativas de rendimiento se mantienen elevadas”, puntualizó el informe.
“Bajo este escenario, estimamos un aumento de 200.000 toneladas en la proyección de producción de girasol, llevándola de 3,2 a 3,4 millones de toneladas”, concluyó la Bolsa de Cereales.
