El gobernador reelecto de Buenos Aires, Axel Kicillof, volvió a hablar del escándalo de su ex jefe de Gabinete, Martín Insaurralde y prometió que reorganizará el Gobierno de cara a su nuevo mandato.
Kicillof ya había anunciado la eliminación de la Jefatura de Gabinete cuando estalló el escándalo de Marbella. Ayer, el mandatario ratificó esa decisión diciendo: "En el Gobierno no va a haber Jefatura de Gabinete".
Y agregó que "hay muchas cosas más que impactan en cómo reorganizar el Gobierno, que depende también de lo que pase a nivel nacional", refiriendo al balotaje entre el aspirante de UxP, Sergio Massa, y el de LLA, Javier Milei.
"El escenario no va a ser el mismo si gana Massa que si gana el candidato de la oposición", reforzó. Y si bien aseguró tener la "convicción" de que el oficialismo alcanzará la victoria, advirtió que "hay que construir una victoria de Sergio Massa ahora".
Desde UxP le adjudican gran parte del triunfo electoral de Massa en las elecciones generales al gobernador de Buenos Aires, ya que luego de la instancia primaria, Kicillof dedicó sus días a marcar las diferencias entre el candidato del oficialismo y la oposición en el territorio bonaerense. En la provincia, Massa superó el 42% de los votos.
De cara al balotaje que se realizará el domingo 19 de noviembre, Kicillof continuará su trabajo de acompañamiento al candidato de UxP tratando de hacer valer su buena relación con los intendentes radicales del interior provincial.
Sobre Insaurralde
"No sé qué efecto tuvo lo de Insaurralde en la elección", dijo el gobernador y reiteró que "no estaba al tanto del viaje". Agregó que "todavía no sabemos si fue una operación o no, pero lo que hizo Insaurralde fue grave". Y remarcó: "Sus acciones son incompatibles con mi gobierno".
En Lomas de Zamora, Federico Otermín, delfín de Insaurralde, logró ser electo como intendente con poco menos del 50% de los votos. El distrito se consolidó como uno de los bastiones clave de la provincia para los resultados del oficialismo, y esos números serían un reflejo del bajo impacto electoral del escándalo en el municipio atravesado por el mismo.
En ese sentido, Kicillof señaló que la intencionalidad del voto se gana con "políticas económicas, sociales, habitacionales, y con la gestión que hizo en la PBA, y si bien lo de Insaurralde fue relevante, lo que le importa a los bonaerenses es vivir bien".
Reconoció que "en la economía no va todo bien ni mucho menos", y destacó que el triunfo en las generales se vincula con la "gestión" en la provincia: "Se hicieron muchas obras, escuelas, caminos rurales". Y destacó que es una gestión valorada por muchos sectores.
