El empleo registrado se sigue recuperando, liderado por monotributistas y estatales

La recuperación de la economía, en un contexto de elevadas tasas de vacunación entre la población, permitió cerrar el 2021 con un mercado laboral más dinámico. Así lo aseguró el “Panorama Mensual del Trabajo Registrado” del Ministerio de Trabajo.

En octubre, según la información que surge de los registros del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), el número de trabajadoras y trabajadores con empleo asalariado registrado del sector privado creció 0,2% (variación sin estacionalidad). Esta variación porcentual implica la incorporación de 11.400 personas al empleo asalariado registrado en las empresas privadas. Se completa, de este modo, un año de crecimiento ininterrumpido del empleo. 

Así, en octubre de 2021, el segmento ocupacional del empleo asalariado registrado privado contró con 146.000 personas más que en octubre de 2020. En consecuencia, en los últimos doce meses se alcanzó a recuperar el 78% de los puestos de trabajo asalariados del sector privado perdidos durante los primeros meses de la pandemia (148.000 sobre un total de 188.000 empleos).

En octubre, el crecimiento del empleo asalariado registrado privado se explicó por el crecimiento en siete sectores. Entre las ramas de actividad que mostraron mayor dinamismo mensual se encuentran hoteles y restaurantes (+1,9%), construcción (+1,3%), explotación de minas y canteras (+0,6%), comercio y reparaciones (+0,3%) y enseñanza (+0,3%).

En el mes de octubre, se contabilizan 9,7 millones de personas asalariadas registradas (incluyendo al sector privado, sector público y el trabajo en casas particulares) y 2,5 millones de trabajadores independientes (monotributistas y autónomos).

Por un lado, el conjunto del empleo asalariado registrado presentó una variación del 0,2% en el último mes (19.300 trabajadores más). Todas las categorías del conjunto de asalariados registrados presentaron una variación de 0,2%: en el sector privado registrado implicó la creación neta de 11.4 00 empleos, en el sector público 7.100 y en el trabajo en casas particulares, 800. Por otro lado, el trabajo independiente presentó un crecimiento en relación al mes anterior de 0,5%, o 12.500 más. “Esta situación se explica, principalmente, por la dinámica del monotributo donde la cantidad de aportantes se incrementó 0,9% en relación al mes anterior (+16.700). 

“Sin embargo esa expansión fue contrarrestada por caídas en la cantidad de aportantes al régimen de autónomos (-0,2%, o 800 personas) y el monotributo social (-0,8%, o 3.400 personas)”, dijo Trabajo. 

En la comparación interanual, el total de personas asalariadas se expandió 2,6% (+251.300 trabajadores). Ese incremento se debe, principalmente, a las variaciones positivas verificadas en el sector privado y público, que incorporaron 142.300 y 111.700 trabajadores, respectivamente (variaciones del 2,5% y 3,5% en cada caso), ya que el trabajo en casas particulares mostró una caída del 0,6% (2.600 trabajadores menos).

Finalmente, el trabajo independiente en conjunto se expandió 7,9% (+189.700 trabajadores) en la comparación interanual. Se registraron expansiones en monotributo y monotributo social (+9,3% y +12,7% respectivamente) y una caída en la cantidad de aportantes al régimen de autónomos (-2,4%).

Según Luis Campos de la CTA, ya hay 239.007 trabajadores más que en febrero de 2020. “En los últimos meses todas las categorías ocupacionales muestran aumentos mensuales, pero la comparación con la situación prepandemia sigue mostrando resultados muy dispares: el crecimiento se explica por los monotributistas y el sector público”, dijo.

“En el sector privado el aumento sostenido del empleo de los últimos meses (12 meses de incremento mensual consecutivos) todavía no fue suficiente para recuperar la caída de la pandemia. Mucho más lejos se encuentran los niveles de fines de 2017 (faltan 340.000 trabajadores)”, agregó.

“En términos relativos las más afectadas siguen siendo las asalariadas en casas particulares. En octubre tuvieron un leve crecimiento, pero siguen cerca de los mínimos de los últimos dos años. Veremos si a partir de noviembre el Programa Registradas empezó a tener algún impacto”, destacó.

“Los datos de noviembre publicados por la EIL son bastante buenos. La variación mensual del índice de empleo fue la mayor desde octubre de 2017 y las suspensiones volvieron a bajar, llegando a los niveles de comienzos de 2019. Posiblemente los datos del verano profundicen estas tendencias, no parece haber grandes cambios a la vista. El desafío es para adelante. Parece claro que el esquema actual se prolongará, a lo sumo, hasta marzo. ¿Después?”, dijo Campos en Twitter.

Las expectativas

Por su parte, la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) da cuenta de una continuidad de este proceso de creación de empleo formal en el mes de noviembre, en el cual la variación del empleo asalariado registrado en empresas de más de 10 personas ocupadas contempló un crecimiento de 0,4%. “Además, los resultados en términos de la expansión del empleo asalariado registrado se prolongan hacia otras categorías ocupacionales, que también reafirman el contexto de recuperación de las condiciones laborales”, destacaron en Trabajo. 

Desde la cartera laboral también destacaron “la importante reducción” que registró la tasa de desempleo en el tercer trimestre del año pasado. “En efecto, el índice de desempleo es el más bajo de los terceros trimestres relevados entre 2016 y 2019, pero lo más importante es que la baja de la tasa de desempleo se consiguió en un entorno de crecimiento de la participación de la población en el mercado laboral (mayor tasa de actividad)”, ponderaron.

¿Home office? Duró poco: 83% de las empresas trabaja 100% presencial

Con el objetivo de analizar el impacto de la pandemia del Covid-19 en las condiciones y modalidades que asumió el trabajo asalariado registrado en las empresas privadas, en el mes de septiembre de 2021, se relevó un módulo de la EIL.

• Entre el total de las empresas relevadas en septiembre, el 21% tenía al menos un trabajador o trabajadora en modalidad mixta (presencial y teletrabajo/home office) y el 12% tenía al menos un trabajador o trabajadora en modalidad de teletrabajo/home office de forma exclusiva. Es decir, que el 33% de las empresas relevadas tenían al menos un trabajador afectado a modalidades remotas.  
• En septiembre, las y los trabajadores en modalidad de teletrabajo/home office exclusivo representaban el 5% del total mientras que las y los trabajadores en modalidad mixta representaban el 11% del total relevado. 
• Por su parte, el 83% ya se encontraba trabajando totalmente de forma presencial.