Cada 16 de octubre se conmemora en todo el mundo el Día de la Alimentación, declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO por sus siglas en inglés, con el fin de impulsar acciones solidarias a favor de la lucha contra la desnutrición y la pobreza.
En ese contexto, la ONG Banco de Alimentos reafirma su compromiso de hace más de dos décadas en la lucha contra el hambre, en un contexto marcado por la pandemia. A partir de la crisis del Covid-19, el organismo incrementó su ayuda por el aumento de demanda por parte de las organizaciones sociales. En el último año han distribuido más de siete millones de kilos de alimentos y productos.
Marisa Giráldez, Directora del Banco de Alimentos de Buenos Airesm afirmó que cada vez es mayor la cantidad de personas que necesitan de un comedor social para alimentarse. “Tenemos la certeza de que, si seguimos trabajando unidos y comprometidos en la lucha contra el hambre, podemos empezar a ser parte de la solución”, aseguró.
Impacto de la pandemia en las ONG
Según un estudio que realizó la consultora Voices! en julio de 2021 mediante encuestas entre representantes de 325 organizaciones sociales -sobre una base de 1200- a las que dona el Banco de Alimentos, 6 de cada 10 organizaciones manifestó que se sintió sobrepasada como efecto de la pandemia y que no están logrando sus objetivos o lo hacen de forma parcial.
A su vez, remarcaron que las tres mayores dificultades que tuvieron que enfrentar las organizaciones durante la pandemia fueron: la falta de financiamiento (46%), las enfermedades generadas por el coronavirus (40%) y la falta de alimentos (37%). Además, 8 de cada 10 organizaciones vieron dificultades en su funcionamiento por la pandemia.
Por otro lado, el 61% de las organizaciones observaron que el número de personas que ayudaron durante la pandemia aumentó, otro 23% señaló que se mantuvo, y un 16% que disminuyó. Mientras que el promedio de beneficiarios previo a la pandemia era de 203, post pandemia pasó a ser de 282.
Por su parte, el 39% dijo que había aumentado la frecuencia con que daban de comer. El principal cambio fue incorporar a toda la familia de los beneficiarios, que en su mayoría solían ser niños, y la incorporación de personas mayores.
En cuanto a cuáles eran los problemas que tuvo que afrontar la gente de la comunidad a la que atienden, se mencionaron: desempleo (42%), falta de comida (30%) y pobreza extrema (23%). Con menciones que oscilaban entre el 16% y el 13%, los encuestados también subrayaron la falta de educación, adicciones, vulneración de derechos de los niños, violencia familiar y falta de vivienda.
Con la ayuda de voluntarios, el Banco de Alimentos asiste en su alimentación a más de 400.000 personas por día
No obstante, 9 de cada 10 organizaciones aseguraron que se mantienen optimistas frente a los desafíos futuros y 8 de cada 10 dicen que la pandemia despertó más sentimientos de solidaridad.
El compromiso de Banco de Alimentos
El trabajo de Banco de Alimentos se basa en solicitar a empresas, supermercados y productores agropecuarios, alimentos y productos aptos para el consumo que fueron sacados de circulación. Luego, con la ayuda de voluntarios, se clasifican y se distribuyen entre más de 1.300 organizaciones sociales y comedores que trabajan en la Ciudad de Buenos Aires y 40 partidos del Gran Buenos Aires, asistiendo en su alimentación a más de 400.000 personas por día.
Para sellar este compromiso, en este año tan difícil para todos, Banco de Alimentos asumió la construcción de un depósito propio hecho a la medida de su operación para recibir más donaciones de alimentos en la localidad bonaerense de Benavídez. De esa forma podrán colaborar con la alimentación de muchas más personas.
Con más de 2.500 m2, este nuevo espacio permitirá contar con mayores dimensiones para el almacenamiento de alimentos secos, así como una nueva sala de clasificación exclusiva de frutas y verduras. Por eso, en este Día Mundial de la Alimentación, el Banco de Alimentos celebra este nuevo proyecto, posible solamente gracias a la articulación de todos los actores y sectores involucrados; y redobla su compromiso afirmando que “si el hambre no se detiene, nosotros tampoco”.
