La obra pública comprende todos los trabajos de construcción e infraestructura impulsados por el gobierno para el beneficio colectivo, en contraste con la obra privada. Se emplean dos modalidades de contratación: Contratación Directa y Licitación Pública, esta última mediante concurso donde varias empresas compiten presentando propuestas técnicas y económicas. El proyecto más adecuado según los requisitos del cliente gana la licitación y la empresa seleccionada ejecuta la obra.
Las obras públicas abarcan diversas áreas clave:
- Infraestructuras de transporte, como autopistas, , aeropuertos, y sistemas ferroviarios y de oleoductos
- Infraestructuras hidráulicas, incluyendo presas, redes de distribución de agua, y plantas de tratamiento.
- Infraestructuras urbanas, que comprenden calles, parques, y alumbrado público, entre otros.
- Edificios públicos destinados a usos educativos, sanitarios, administrativos u otros servicios.