Filmus: “La ley de cannabis es un aporte a la producción y al acceso como producto medicinal”
A fin de complementar la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis, se aprobó el marco regulatorio para el desarrollo de la industria del cannabis medicinal y del cáñamo industrial, que ya contaba con media sanción por parte del Senado.
En la actualidad, ambas industrias están creciendo exponencialmente y serán una fuente de empleo de calidad y desarrollo económico a nivel global, por lo que el objetivo de la normativa es brindar un marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal, complementando la actual legislación.
Al respecto, el Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, señaló: Esta ley amplía la posibilidad de la producción y del acceso al cannabis como producto medicinal, lo que implica que muchas más personas van a poder tener acceso a una producción que va a facilitar el derecho a la salud, que hasta ahora podían hacerlo muy pocos.
Y agregó: A su vez, desde el Ministerio de Ciencia y Tecnología estamos trabajando fuertemente para que no solo sea la semilla sino que sea también la capacidad de elaborar productos con aporte tecnológico nacional; y generar una verdadera industria muy federal porque puede llevarse adelante en muchos lugares del país y en unidades de producción muy pequeñas. En este sentido también vemos una capacidad de exportación importante.
- El potencial económico para el desarrollo de la actividad del cannabis medicinal y el cáñamo industrial para el año 2025 se proyecta en 10.000 nuevos empleos (alto porcentaje en I+D+i), US$ 500 millones en ventas al mercado interno anuales y US$ 50 millones de exportación anuales.
Cáñamo industrial
En el caso del cáñamo industrial se legalizan los eslabones productivos, los de comercialización y sus subproductos.
Además se promueven mecanismos de autorizaciones para los productores y comercializadores, y estrategias de seguridad, fiscalización y trazabilidad en la cadena.
ARICCAME
Además, impulsa la creación de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME) la que tendrá entre sus funciones regular, administrar y fiscalizar toda la cadena productiva de cannabis y cáñamo. También la de otorgar y administrar autorizaciones para producción y comercialización, con especial atención a PyMES, cooperativas y economías regionales.
La ARICCAME tendrá entre sus facultades la capacidad de coordinar acciones necesarias con organismos reguladores para el desarrollo del sector, y estará compuesta por los ministerios nacionales de Desarrollo Productivo; Salud; Agricultura, Ganadería y Pesca; Ciencia y Tecnología; y Seguridad.
Investigación, desarrollo e innovación, las claves
En esa línea, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación lanzó el Programa de Investigación y Desarrollo en Cannabis, convocatoria que ofrecerá $250 millones en financiamiento a proyectos en investigación y desarrollo en cannabis, el cáñamo y sus derivados para uso medicinal, terapéutico y paliativo, sus usos clínicos y/o industriales, y los aspectos sociales y culturales asociados.
El Programa posee modalidad de ventanilla permanente, y su objetivo es promover proyectos de investigación y desarrollo (I+D) destinados a generar conocimientos y avances en torno a las propiedades de la planta de cannabis y sus derivados, sus usos clínicos y/o industriales, y los aspectos sociales y culturales asociados. De esta manera, se espera fortalecer e impulsar las capacidades en el sistema científico y tecnológico que contribuyan al desarrollo e implementación de políticas públicas por parte de los gobiernos provinciales y municipales en la temática, en diálogo con la sociedad civil.