La reforma laboral sigue siendo un punto de conflicto en Diputados
Las diferencias entre los bloques dialoguistas persisten de manera interna a pesar de los dictámenes de mayoría para la Ley de Bases y el Acuerdo Fiscal. Uno de los puntos de mayor conflicto, que incluso llegó a hacer peligrar el avance de los proyectos, fue la reforma laboral.
Luego de que el capítulo del DNU que trataba una serie de cambios en el área de trabajo fuera suspendido por la Justicia, comenzaron a circular nuevas propuestas para su incorporación en el debate legislativo.
El texto final se votará la semana que viene en el recinto de Diputados. Allí se incluye el fondo de cese optativo por convenio al estilo UOCRA, períodos de prueba de seis meses con posibilidad de extensión a ocho para empresas de 6 a 100 empleados, la eliminación de multas al trabajo mal registrado, un agravamiento de la indemnización en casos de discriminación y la simplificación del registro.
De acuerdo a lo que argumentan desde la Casa Rosada, estos cambios en la legislación deben ser impulsados para agilizar el mercado de trabajo y, para eso, buscan intentar consensuar con todos los sectores. Por esta razón, en su redacción, se tomaron conceptos de iniciativas de la UCR, el PRO e incluso tuvieron en cuenta planteos de la CGT.
A pesar de ello, las internas en la oposición dialoguista no tardaron en desatarse.
Por un lado, Karina Banfi, la vicepresidenta de la bancada de la UCR, señaló en el plenario de las comisiones que, desde el radicalismo, se propone un debate por más medidas que impulsen la "modernización laboral", ya que consideró que los marcos normativos en materia de trabajo "son un obstáculo". "Nuestra propuesta se basa en mirar el trabajo del futuro, dónde estamos parados hoy y hacia dónde estamos yendo", sostuvo.
Sobre este último punto, Banfi cruzó a Miguel Ángel Pichetto, jefe de la bancada Hacemos Coalición Federal, por "defender" al sindicalismo debido a su sugerencia de dejar para una discusión futura los artículos que se relacionan con empresarios y los gremios. "Se convirtió en el vocero de la CGT", expresó en diálogo con Radio Splendid.
En tanto, dentro del bloque de Pichetto también se señalaron diferencias. En ese sentido, los diputados de Santa Fe, Mónica Fein y Esteban Paulón, se mostraron "dispuestos" a debatir modificaciones en la legislación, pero entendiendo que "no pueden ser regresivas ni aprobadas en un breve debate a puertas cerradas de los involucrados".
El desacuerdo más grande se encuentra en los seis diputados que pertenecen a la Coalición Cívica, cuyo presidente, Juan Manuel López, adelantó que presentarían dictámenes propios. Si bien manifestaron que muchos temas van a coincidir con el dictamen de la mayoría, no van a votar las dos delegaciones que quedan.
Confianza en el oficialismo
En tanto, desde La Libertad Avanza aseguraron que el Gobierno tiene los votos para darle media sanción a la nueva Ley de Bases que se tratará el lunes en la Cámara de Diputados, aunque reconoció que puede haber más cambios en el capítulo de la reforma laboral.
Según el ministro del Interior, Guillermo Francos, se conseguirían entre 140 y 150 votos para aprobar en general la Ley de Bases en la Cámara Baja, pero admitió que en el tratamiento en particular van a tener más resistencia en algunos artículos.
"Seguramente va a haber algunos temas que intenten agregar en lo laboral por parte del bloque de la UCR. Querían algunos temas más, pero eso entorpecía la negociación con otros bloques, de manera que seguramente ahí va a haber algún intento de una propuesta de incorporar algo y veremos cómo se debate en el recinto", puntualizó en declaraciones en Mitre.