Brasil entra en recesión y la economía se derrumba 9,7%

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01-09-2020
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La economía de Brasil se derrumbó 9,7% en el segundo trimestre, la mayor caída de su historia, y entró en una recesión económica, comparado con los primeros tres meses de 2020, informó hoy el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

Con más de 121.000 muertos desde el inicio de la pandemia de coronavirus, el Producto Bruto Interno (PBI) tocó su pozo histórico en los meses de abril, mayo y junio, y el segundo trimestre llegó a los niveles más bajos desde que se inició el muestreo.

Comparado con el segundo trimestre de 2019, la caída es del 11,4%.

En el período del segundo trimestre y caída histórica de la economía brasileña, la ayuda aprobada por el Congreso y ejecutada por el Gobierno llegó a casi la mitad de la población brasileña sin ingresos, reduciendo a niveles inéditos la indigencia, aunque hubo un estallido de pérdidas de puestos de trabajo formales e informales.

El primer trimestre había caído 2,5% y, con este descenso en el segundo, Brasil, la mayor economía latinoamericana, está en recesión por los efectos inmediatos de la pandemia.

La anterior recesión había sido en 2015 y 2016, en el marco de una crisis económica, social y política vinculada originariamente a la caída del precio de las materias primas.

De acuerdo con el IBGE, el consumo de las familias y la inversión se desbarrancaron en el segundo trimestre.

El sector servicios, responsable por el 70% del valor agregado al PBI de Brasil, retrocedió 9,7 por ciento en el trimestre y la caída no fue mayor por el salto del comercio electrónico experimentado en las cuarentenas.

La industria retrocedió 12,3%, sobre todo por la falta de producción del sector automotriz y vestuario, mientras que el agronegocio, principal responsable por la generación de riqueza de Brasil, creció 0,4%.

La demanda de las familias se derrumbó 12,5% en el segundo trimestre, las compras del gobierno cayeron 8,8% y la inversión se redujo 15,4%.

Las importaciones cayeron 13,2 por ciento y las ventas externas crecieron 1,8%.

El Gobierno envió al Congreso el lunes el presupuesto para 2021 con una planificación para un ajuste de gastos y un crecimiento económico de 3,2%.

El equipo económico del ministro Paulo Guedes, de todos modos, calculó que Brasil apenas tendrá superávit fiscal a inicios de 2027: la última vez que se logró ese resultado fue en 2013, antes de la crisis que golpeó de lleno el gobierno de Dilma Rousseff, destituida en 2016.

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