Convocaron una marcha para el jueves 22. ¿Con qué motivo?
La Asociación Bancaria ha previsto una movilización por la reapertura de paritarias, la derogación del impuesto a las ganancias y por el impacto de las medidas del Central, que seguramente van a afectar el empleo. También por la situación que prevemos que van a transitar los trabajadores del Citi y del Hipotecario, con serio riesgo de perder sus puestos de trabajo.
De todos modos el Gobierno parece haber respondido ya a esos reclamos.
Sobre el impuesto a las ganancias anticipó que eviará un proyecto para modificar gradualmente las escalas dentro de los próximos tres años. El compromiso electoral del Presidente era derogar el impuesto a las ganancias. La primera reflexión es que mintió o no está cumpliendo con su compromiso. El segundo tema es que habrá que ver cuáles son las modificaciones. La medida que tomó el Presidente a principio de año vinculada al impuesto a las ganancias a nosotros nos ocasionó que 20.000 trabajadores que no pagaban se incorporaran a pagar. Entonces, somos bastante escépticos sobre los anuncios que hace el Gobierno. Cada vez que anuncia que va a hacer algo bueno termina haciendo algo como eso.
Respecto a la reapertura de paritarias, el Presidente dijo que no hay motivos para hacerlo porque está bajando la inflación.
El se arroga facultades que no le corresponden, porque la paritaria es un acuerdo entre dos partes privadas: el sindicato y el sector empresario, salvo que sea la paritaria de los trabajadores de la Administración Pública. En el caso nuestro no tendría por qué intervenir o emitir opinión, más aún que en nuestro convenio está establecido claramente que cuando la circunstancias económicas lo ameriten una de las partes puede pedir la reapertura. Estamos haciendo uso de la cláusula del convenio porque la inflación, desde enero a hoy cubre nuestro acuerdo salarial, que fue del 33%.
¿Cree que los bancos van acceder? En el foro que culminó ayer un representante de la banca privada dijo que el pedido es inviable.
Ellos pueden expresar su posición y nosotros la nuestra, dependerá de los niveles a los que quieren que llegue el conflicto. También el año pasado las cámaras empresarias asociadas con la posición del Gobierno decían que el aumento salarial tenía que estar más cerca del 20, 25% y terminamos firmando otra cosa porque la realidad marcó otra cosa.
También reclaman por la “uberización” del sistema financiero. ¿A qué se refieren?
A que empiecen a participar en el sistema financiero actores que no están regulados y que ponen en peligro nuestros puestos de trabajo. Por ejemplo, hoy se pueden hacer transferencias u operaciones bancarias a través de Internet y nadie está regulando eso. Sin embargo, un banco sí está regulado por el Central: tiene posiciones de encaje que cubrir, tiene mínimos que garantizar de riesgos de incobrabilidad y tiene salarios de trabajadores que afrontar.
También alertamos sobre el proyecto que tiene el Central de que tanto supermercados como farmacias sean bocas de expendio de productos financieros bancarios como anticipios de dinero, préstamos o puedan abrir cuentas, cajas de ahorro. Esos trabajadores no son de nuestra actividad y ubican a los bancos en condiciones desventajosas.
¿Cómo evalúa el desempeño de la CGT unificada?
Recién asume, está en una ronda de conversaciones y hay una reunión del confederal de la CGT convocada para el día 23, cuando creo que la mayoría de los gremos vamos a proponer una medida de fuerza en función de las políticas que ha tomado el Gobierno y que claramente nos han perjudicado. Caída del salario real por un lado, por otro 120.000 desempleados reconocidos por el Gobierno Nacional, un tarifazo que golpea el poder adquisitivo de los trabajadores, un apertura de la importación que hace caer la acividad económica. Creo que hay motivos más que suficientes para una medida.
¿Entonces usted cree posible que el próximo viernes se decrete un paro nacional?
Sí, es muy probable.