El Comité Ejecutivo de autoridad de Cuencas y el Consejo de Gobierno del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado, formado por los gobernadores de La Pampa, Buenos Aires, Mendoza, Neuquén, Río Negro y el Minisiterio del Interior, debía aprobar la construcción de la represa Portezuelo del Viento, pero un enfrentamiento entre los gobernadores de La Pampa, Río Negro y Mendoza llevó a su cancelación. Y abrió el grifo para una secuencia de acusaciones cruzadas, a tres bandas, ciertamente inesperado.
“Aparentemente siguen las diferencias entre La Pampa y Mendoza y la falta de consenso en cuanto a estas dos provincias fue lo que llevó a suspender la reunión”, aseguró el gobernador rionegrino Alberto Weretilneck, días después de la suspensión del evento. Con dardos por elevación para Carlos Verna, el justialista pampeano, y Alfredo Cornejo, el radical mendocino. Las respuestas, por cierto no tardaron en llegar. “De un burro sólo podés esperar burradas”, fue la más dura, en boca de Verna.
“La Pampa no se opone a Portezuelo. Nos oponemos a que Portezuelo no sea formulado en los términos del tratado del Coirco. Queremos que Mendoza presente los estudios de impacto ambiental. Nosotros tenemos un convenio con la Universidad o sea que va a ser totalmente apolítico. Se tiene que presentar el plan de llenado porque no es lo mismo llenar la presa en un año, tres o cinco y dejar pasar una décima parte del río o nada, y tiene que presentar un plan de manejo que debe aprobar Coirco que es el que determina los volúmenes de agua que la presa deja pasar o retiene”, explicó.
Otro tema que enfrenta a los gobiernos está ligado a la venta de carne con hueso. El acuerdo para que se levante la barrera que impide su circulación desde La Pampa al resto de la Patagonia está lejos de concretarse. Weretilneck volvió a desestimar los planteos de Verna y le restó importancia al deseo de recusar al ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, para que sea el presidente Mauricio Macri el que tenga la última palabra y termine, o no, el conflicto, según el sitio Letra P.
Este hecho, por cierto, servía como antecendete para los cruces de las últimas horas y el exabrupto de Verna. “No tenemos diálogo con Verna. Hoy, por la situación sanitaria, está cortado”, había Weretilneck la semana pasada. “Dejen de defender intereses privados”, le constestó Verna en la exposición rural de Santa Rosa, en su provincia, con el gobierno de Neuquén, encabezado por Omar Gutiérrez también como destinatario.
El proyecto
Portezuelo es casi una obsesión para los mendocinos. Cornejo ya tuvo varias reuniones en Casa Rosada para avanzar, pero tiene la resistencia de La Pampa. En la visita del presidente Mauricio Macri a tierra pampeana, Verna le recordó cómo los mendocinos provocan un “grave” impacto ambiental al río Atuel. “Queremos que nos devuelvan el río que nos robaron”, sostuvo entonces Verna.
