El Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés) anunció que la deuda mundial alcanzó un nuevo récord de casi US$ 300 billones, aunque la relación deuda/PIB disminuyó por primera vez desde el inicio de la pandemia.
Los niveles de deuda, incluyendo la gubernamental, familiar, corporativa y bancaria, aumentaron US$ 4,8 billones. Con una cifra de US$ 296 billones, se sitúa US$ 36 billones por encima de los niveles prepandémicos.
El IIF destacó que, durante el segundo trimestre, gracias a la reactivación de la economía, la deuda como porcentaje del PIB cayó de la cifra récord de 362% hasta el actual 353%.
Aunque esta tendencia se registró en 61 de los 51 países monitoreados, la recuperación no fue lo suficientemente fuerte como para hacer que los índices de endeudamiento volvieran a los niveles previos a la pandemia.
La relación deuda/PIB, excluyendo el sector financiero, está por debajo de los niveles prepandémicos en solo cinco países: México, Argentina (por el canje de 2020), Dinamarca, Irlanda y Líbano. Por su parte, China fue uno de los territorios que experimentó un aumento más pronunciado de su deuda.
En los mercados emergentes, excluida China, los niveles de endeudamiento subieron a un nuevo récord de US$ 36 billones en el segundo cuarto de 2021, mientras que, entre las economías desarrolladas, particularmente en la zona euro, volvió a incrementarse por el endeudamiento de Francia y Alemania. En el caso de Estados Unidos, la acumulación de deuda de alrededor de US$ 490.000 millones en el segundo trimeste fue la más lenta desde la aparición del coronavirus.
“Tras un número récord de incumplimientos soberanos en 2020, solo hubo tres en 2021: uno de Zambia que ya estaba en incumplimiento de sus eurobonos, mientras que Belice y Surinam lanzaron solicitudes para aplazar el pago”, destacó el IIF.
