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Hay que desactivar todas las acciones que apunten a profundizar la grieta

PRESIDENTE-GRIETA
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06 octubre de 2020

Por Augusto Milano

El Gobierno está intentando recalibrar su estrategia en un momento en que enfrenta múltiples desafíos.

Desde que se desató la pandemia, se tomaron estrictas medidas sanitarias que tuvieron un lógico impacto económico que, atenuado con una serie de medidas como el IFE y el ATP, apuntaron a preservar empleos e ingresos.

Los datos de pobreza y empleo conocidos recientemente dejaron en claro que, de no haberse tomado esas medidas, la situación sería mucho peor, pero también exhibieron que, para que mejoren, hacen falta iniciativas que apunten a incrementar la producción y moderar la tasa de inflación. Argentina será el país del G 20 que tendrá en 2020 mayor caída del PIB y la tasa de inflación más alta: el desafío no es menor.

La reunión a la que convocó ayer el Gobierno con empresarios y trabajadores, que puede ser el punto de partido para un acuerdo social, es un paso positivo.

El desafío es poner en marcha las medidas que aseguren cumplir con los objetivos sobre los que hay consenso. Todos reconocen que Argentina necesita dólares y uno de los caminos para logarlo es incrementando las exportaciones. Sin embargo, prácticamente no se adoptan decisiones para lograrlo. Los dólares también pueden llegar por un incremento de las inversiones indispensables para mover la economía. Pero, de vuelta, ¿qué se está haciendo para alentarlas? Lo mismo ocurre en el caso del empleo. ¿Cuál es el plan para recuperar los cientos de miles que se perdieron?

Un acuerdo social puede ayudar a dar las respuestas a estos interrogantes.

Otro paso ordenador de la economía puede venir con el acuerdo con el FMI que le daría un horizonte al esquema fiscal, clave para ordenar el frente cambiario. Precisamente, las entidades empresarias recibieron el pedido por parte del Gobierno para que manifiesten su apoyo a las negociaciones con el organismo internacional.

Pero para que las iniciativas que implican colaboración entre distintos sectores prosperen hace falta una señal política clara por parte del Presidente y es la desactivar todas aquellas acciones que apunten a profundizar la grieta.

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