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Reservas en baja: el mercado espera la reacción del Gobierno

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14 septiembre de 2020

De la mano de una creciente demanda de dólares desde hace varios meses, el Banco Central (BCRA) continúa perdiendo reservas. Aunque las reservas netas varían según la forma de medirlas, todos los análisis coinciden en que actualmente se ubican por debajo de los US$ 10.000 millones. En tanto, desde el Gobierno siguen afirmando que no cerrarán más el cepo cambiario (algo que habían deslizado hace unas semanas), aunque algunos analistas del mercado creen que lo terminará haciendo ya que la dinámica actual es insostenible.

“Los últimos datos asociados a la posición de reservas netas del BCRA muestran una foto preocupante. Nuestra medida preferida de reservas netas (que descuenta encajes, swaps y repos pero no las tenencias de oro o los Derechos Especiales de Giro) se ubicó en US$ 9.341 millones al 7 de septiembre, mostrando una importante caída con respecto a los US$ 9.944 millones de fin de agosto y los US$ 11.180 millones de julio. Las reservas netas no caían a estos valores desde comienzos de octubre de 2015”, detalló el Grupo SBS.

Sumado a lo anterior, según el informe de la consultora, la información vinculada a la intervención cambiaria del BCRA confirma que la dinámica es muy negativa, con ventas de dólares que siguen acelerándose: datos oficiales al 7 de septiembre muestran que el BCRA vendió US$ 493 millones en las primeras cinco ruedas de septiembre y unos US$ 1.295 millones en las últimas veinte ruedas, cifras que representan el 5% y el 12% de las reservas netas, respectivamente.

“Es importante notar que el BCRA no vendía divisas a un ritmo similar desde fines de mayo, momento en que la entidad introdujo una serie de reglas que restringen la demanda de divisas, calmando la presión sobre las reservas por algunas semanas”, agregó el informe, que remarcó que este ritmo de ventas de divisas parece difícil de sostener por mucho tiempo, por lo que se una posible reacción de política económica.

Si dicha reacción no aparece, es esperable que la entidad monetaria siga perdiendo reservas. Hay varias alternativas para el BCRA, como endurecer aún más el cepo cambiario, usar stocks (deuda) para bajar la brecha o intentar un desdoblamiento formal. “Estas medidas pueden calmar el mercado transitoriamente, pero no soluciona el desequilibrio del mercado cambiario. Sólo retrasan la crisis cambiaria (una devaluación)”, afirmó la consultora FMyA.

Al respecto, estimó que el Gobierno intentará “aguantar” con diferentes medidas hasta después de las elecciones de octubre de 2021. “Si aplica estas medidas, puede evitar una devaluación en lo que resta de 2020, pero luce muy difícil llegar sin un movimiento del dólar a las elecciones del año que viene”, advirtió en un reciente informe.

Alternativas

Una de las principales alternativas, además de un endurecimiento mayor del cepo cambiario, es la intervención mediante el uso de stock de deuda: venta de bonos en dólares en poder del BCRA o de la Anses; o activar parte del swap con China y pagar 7% anual; o colocar bonos en pesos “dólar-linked” a inversores no residentes; o que el BCRA siga vendiendo futuros en Rofex, que también es deuda de la entidad monetaria.

En la tercera opción, la del desdoblamiento cambiario, el Gobierno podría cambiar el régimen cambiario y fijar un dólar comercial (un valor bajo, como el oficial de hoy) y otro financiero (un valor alto, como el “contado con liqui”), buscando equilibrar el mercado cambiario y así intentar bajar la presión sobre las reservas. “Guzmán y Stiglitz avalan este régimen, a pesar del fracaso en experiencias del pasado”, señaló FMyA.

En ese sentido, ante este escenario, la consultora estimó que el Gobierno optará primero por la opción de usar el stock de deuda, lo cual considera que no funcionará, y que después intentará ir por la vía del desdoblamiento formal del mercado de cambios.

“Usar stocks para bajar la brecha cambiaria no tendrá resultado porque no hace nada en cambiar la señal de precios del mercado oficial de cambios. Es decir, puede usar US$ 3.000 millones del Swap chino o US$ 7.000 millones de bonos del BCRA para bajar la brecha cambiaria, pero eso no cambiará la presión que generan los cinco segmentos que hoy mueven el mercado oficial de cambios: exportadores, importadores, turismo, deuda y dólar ahorro”, explicó.

“Es decir, usar deuda por US$ 10.000 millones (entre swap y bonos argentinos) más las reservas netas (de US$ 7.300 millones) puede estirar la situación unos meses. Pero si el mercado cambiario sigue deficitario, lo único que hace esta alternativa es posponer la 'crisis cambiaria'. Imaginamos que esto lo sabe el Gobierno y el mercado”, agregó.

En cuanto al desdoblamiento formal, FMyA afirmó que si hoy estuviese implementado debería aumentar la oferta de dólares, pero también la demanda de los no residentes. Sin embargo, de acuerdo con su informe, el “impacto inmediato” sería que el BCRA volvería a comprar reservas.

“El Gobierno puede intentar discriminar 'tipos de cambio sectoriales' (agro, industria y servicios) o importaciones de insumos o bienes de capital (85% del total), esenciales, suntuarios o bienes finales (15% del total). Pero lo más delicado es donde canalizaría la deuda comercial (por importaciones) o financiera (bonos), ya que si este segmento va al 'financiero' puede afectar a los balances de empresas y tendrá impacto en actividad y precios. El BCRA fomentaría que estos refinancien (roll over) las deudas”, sostuvo.

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