“La caída en el consumo mundial de petróleo como consecuencia de la pandemia de coronavirus será mayor de lo previsto y llegará a 9,09% frente a 8,03% estimado hace un mes”, informaron ayer desde la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep).
“La actual revisión a la baja se debió al mayor freno de las actividades en algunos países durante el segundo trimestre que lo calculado inicialmente”, según informaron desde el organismo.
“Los nuevos cálculos prevén que la demanda mundial promedie 90,6 millones de barriles diarios (mbd) en 2020, después de haber rozado 100 mbd en 2019”, precisaron
“La caída en la producción fue estimada en 9,1 mbd, unos 100.000 barriles por día, más que lo calculado en el informe anterior”, explicaron.
A pesar de prever “una paulatina recuperación”, el documento de la Opep resaltó “la incertidumbre que aún prevalece sobre la evolución futura del virus y su impacto en el mercado petrolero.”
“De cara al futuro, la evolución de los precios del crudo y de los productos en el segundo semestre del año seguirá viéndose afectada por la preocupación por una (eventual) segunda oleada de infecciones y el aumento de las existencias (reservas de crudo) mundiales”, advirtieron.
Además, “se refirieron al recorte de suministros pactado en abril por sus 13 miembros de la Opep y sus 10 aliados independientes que rige desde mayo, sino que también esperan que otros productores rebajen su bombeo para apuntalar la cotización del barril”.
“Esto apunta a la necesidad de seguir esforzándose por apoyar el reequilibrio del mercado”, indicaron desde la Opep.
En tanto, la fuerte caída que vienen sufriendo la producción petrolera y los precios este año hizo que el Gobierno argentino impusiera un barril criollo para estabilizar la situación en Vaca Muerta
