El Gobierno de Reino Unido anunció hoy que ya no permitirá que la compañía tecnológica china Huawei acceda a su red 5G en medio de la creciente presión sobre el primer ministro Boris Johnson para que tome una posición contra Beijing.
La medida es una gran victoria para la administración Trump, que viene tratando de sacar a Huawei de las redes de todo el mundo y ejerce una intensa presión sobre su aliado más cercano para que haga ese movimiento.
Huawei trabaja en estrecha colaboración con el gobierno chino, dejando el equipo de la compañía susceptible a actores malignos y posible vigilancia estatal.
El Reino Unido ya prohibió a Huawei acceder a sus redes de comunicaciones a principios de este año.
"Esta no ha sido una decisión fácil, pero es la correcta para las redes de telecomunicaciones del Reino Unido, para nuestra seguridad nacional y nuestra economía, tanto ahora como a largo plazo", dijo Oliver Dowden, ministro de telecomunicaciones del Gobierno, a la Cámara de los Comunes.
"Lo que queremos es una relación moderna y madura con China basada en el respeto mutuo", agregó.
Desde el otro lado, China sostiene que Estados Unidos está resolviendo las preocupaciones de seguridad como un medio para derrocar a la competencia económica.
