Por quinta vez el Gobierno decidió prorrogar las negociaciones. En un nuevo plazo, los tenedores de bonos tendrán tiempo hasta el 24 de julio para aceptar la propuesta para reestructurar la deuda argentina emitida bajo legislación extranjera, por US$ 66.300 millones.
"Desde la extensión anterior de la Invitación, la República continuó manteniendo proactivamente debates con distintos grupos de inversores, adelantó posibles ajustes a la Invitación y recibió comentarios de inversores, así como también otras sugerencias sobre los diferentes caminos para mejorar los recuperos", informó la cartera, encabezada por Martín Guzmán.
Y agregó: "Argentina cree firmemente que una reestructuración de deuda exitosa contribuirá a estabilizar la condición económica actual, mitigando las restricciones a mediano y largo plazo sobre la economía de Argentina, las cuales fueron creadas por la actual carga de deuda, y reencauzando la trayectoria económica del país hacia el crecimiento a largo plazo".
Con dificultades para llegar a un acuerdo, el Ministerio de Economía anunció que oficializó esta nueva extensión a través de un comunicado a la Comisión Nacional de Valores de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés).
"Argentina y sus asesores pretenden aprovechar esta extensión para continuar con las discusiones y permitirles a los inversores continuar contribuyendo con una reestructuración de deuda exitosa", concluyó el comunicado.
