El directorio del BCRA, que se reunió ayer, como todos los jueves, tomó una serie de decisiones “tendientes a garantizar la rentabilidad positiva de los depósitos en pesos en el sistema financiero, para las empresas, como para las personas y para los productores agropecuarios que liquiden cosecha”. En criollo, para que no se vayan hacia el dólar.
Miguel Angel Pesce y su mesa chica resolvió subir la tasa de interés por los plazos fijos Badlar y TM-20 (estaban en torno a 18%20%), que ahora pasará a 26,6% TNA (que es el equivalente a 70% de la tasa Leliq).
Hasta ahora esa tasa regía para personas humanas hasta $4 millones, ahora se extiende a todos los plazos fijos. Cualquier plazo fijo tiene esa rentabilidad de 26,6% TNA. Significa una tasa efectiva mensual de 2,22% (supera por 0,7 puntos a la inflación de abril y está por encima de cualquier proyección de inflación privada) y una TEA de 30,10%.
“Además, se generó un incentivo a los bancos para que salgan a capturar depósitos DIVA (Depósito Interés Variable) ligados a la cotización de cereales y oleaginosas. Es para atraer a los productores que liquidaron cosecha desde noviembre y que van a poder hacer estas colocaciones. Estos depósitos acompañan la evolución del precio de la soja.
De esa manera, cualquier depósito en el sistema financiero tiene rentabilidad positiva y para los productores que liquiden la garantía de que mantienen el valor de la cosecha.
Asimismo, se podrá depositar cheques por ventanilla. Esta decisión pretende facilitar la gestión a empresas que deben depositar cantidades importantes de cheques”, dijeron desde el BCRA.
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“Queremos ser un buen deudor”
El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que el Gobierno busca que Argentina sea “un buen deudor” que hace “frente a sus compromisos”, en el marco de la negociación hasta el 22 de mayo para alcanzar un acuerdo con los acreedores privados. “Queremos convertir a Argentina en un buen deudor, que pueda hacer frente a sus compromisos”, aseguró el titular del Palacio de Hacienda ante El País de España. El funcionario insistió con que, para Argentina, “lo fundamental es que el acuerdo sea sostenible”, y volvió a señalar que lo propuesto es “consistente” con la idea de “restaurar la sostenibilidad de la deuda”.
