Por Pablo Varela
En la semana en donde se inicia una nueva etapa del aislamiento obligatorio y la espera de la implementación de medidas anunciadas por el Gobierno para rescatar a sectores productivos, la Cámara de Diputados trabaja en la implementación de un nuevo mecanismo de trabajo, que permita sesionar a distancia.
El titular de la Cámara Baja, Sergio Massa, viene trabajando en una modificación del reglamento interno que permita poder sesionar de manera virtual y remota. Voces legislativas del oficialismo, aseguraron ante El Economista que dichas modificaciones se encuentran “listas”, y esta semana deberían ser definidas por la Secretaría General de Diputados.
Los cambios en los que vienen trabajando desde la presidencia de la Cámara son “identificación facial con régimen de validación por Renaper (Registro Nacional de las personas)”. La introducción de dicho sistema permitiría dar quórum a distancia y que no haya trampa respecto de las identidades de los legisladores. Así, lo detallaron desde el entorno del tigrense.
Además, los cambios incluirían un “sistema de claves para loguearse” y el “sistema de voto remoto”.
A su vez, tanto la Comisión de Modernización como la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento deberán trabajar para poder aprobar e implementar de manera definitiva las modificaciones que ya están diseñadas.
En tanto que la semana pasada, todas las miradas quedaron posadas sobre los proyectos que impulsan desde el ala kirchnerista del Frente de Todos, puntualmente las iniciativas de Máximo Kirchner, Hugo Yasky y hasta del líder social Juan Carlos Alderete que proponían avanzar con nuevos gravámenes. La unificación de dichos proyectos quedó en cabeza del titular de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller, quien aseguró que el detalle fino de la normativa, estará hacia el final de esta semana.
Fuentes legislativas del FdT no descartaron ante este diario la posibilidad de que en la semana haya una reunión entre Massa y Kirchner para avanzar con mayores precisiones en el proyecto.
El presidente Alberto Fernández sostuvo que el Poder Ejecutivo es ajeno a las legislaciones en materia de tributara y que es solo potestad del Congreso, aunque desde la presidencia de la Cámara Baja aseguran que ninguna normativa avanzará sin la “luz verde” del Presidente.
Al mismo tiempo el massimo también impulsa su propia agenda económica. Entre la batería de proyectos se evalúa la “eliminación del impuesto a las ganancias al personal de servicios esenciales” (algunos servicios son alcanzados por el impuesto en caso de hacer horas extras), un “sistemas de premio a la inversión productiva de quienes traigan la plata del blanqueo” con orientación a la producción, promoción impositiva a la construcción de viviendas pequeñas, y un “régimen extraordinario de gravamen a capitales especulativos”.
Esta semana continuarán las sesiones informativas de ministros ante las comisiones en Diputados, entre los que se encuentran Luis Basterra (Agricultura), Claudio Moroni (Trabajo), Elizabeth Gómez Alcorta (Mujeres y Diversidad) y també de Mario Cafiero del Inaes.
“En los últimos días pasaron seis ministros en nueve días por el Congreso. Eso nunca había pasado”, resumen en el oficialismo.
