Con la industria paralizada a causa del aislamiento social obligatorio, el 62% de las empresas metalúrgicas acudieron a sus ahorros para poder hacer frente a los pagos y obligaciones de marzo, según un informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA).
A su vez, el 41% decidió recurrir a una línea de crédito en un banco privado, el 34% descuento de cheques, 26% prefirió pedir créditos a bancos públicos, el 15% pedir un rescate a inversores, el 13% se inscribió en el Programa de Recuperación Productiva (REPRO) y el 13% eligió otros modos de financiarse, como la venta de moneda extranjera o bonos fiscales.
“El Gobierno, a partir del Decreto 326/2020 inyectó fondos en el Fondo de Garantías del FOGAR para facilitar el acceso a créditos para que las Pymes, así como se tomaron diversas iniciativas para incentivar el crédito a las Pymes”, explicó la asociación en su comunicado.
Sin embargo, agregó que “a pesar de estos esfuerzos, a partir del relevamiento permanente que se hace desde ADIMRA con las empresas metalúrgicas, múltiples compañías han planteado dificultades para acceder a los fondos, ya sea la burocratización, el desconocimiento en la institución bancaria de estas líneas, el sistema operativo para acceder, o que los fondos que otorgan son menores a los previstos, entre otros puntos”.
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En la Provincia de Buenos Aires, las medidas adoptadas para afrontar los pagos y obligaciones son muy similares a los niveles generales. En primer lugar se acudió a los ahorros (63%), luego a la toma de créditos blandos en bancos privados (35%), blanqueo de cheques (27%), créditos de bancos públicos (19%), rescate de inversiones (13%) y por último, solicitaron REPRO (10%).
Sin embargo, hay provincias que se destacan por su comportamiento. Por ejemplo, en Santa Fe, el 85% de las empresas acudió a sus ahorros para pagar las deudas de marzo. El 55% pidió créditos blandos a bancos privados, el 45% hizo descuento de cheques, el 45% acudió a créditos en bancos públicos, el 25% solicitó REPRO y el 18% pidió rescate de inversiones.
En cambio, en Córdoba no se utilizaron tantos ahorros, pero tampoco se recurrió a REPRO. El 50% de los empresarios utilizó sus propios ahorros, el 30% hizo descuento de cheques, el 20% solicitó créditos blandos tanto en bancos públicos como en privados, el 10% acudió a rescate de inversiones y el 0% solicitó ayuda REPRO.
Respecto a las preocupaciones de los líderes metalúrgicos, en una escala del 0 al 10, los empresarios respondieron que su mayor miedo es el pago del salario con 8.5 puntos. Lo siguen el pago de impuestos (8.2), la falta de capital de trabajo (7.8), la imposibilidad de cumplir con entregar a mercado local (7.5), la falta de personal en planta (7.3), el clearing bancario (7.1), la falta de insumos (6.9) y la imposibilidad de cumplir con el mercado externo (5.3).
