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En enero mejoraron las condiciones financieras, pero bajo gran estrés

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11 febrero de 2020

El Indice de Condiciones Financieras (ICF) elaborado por el Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (Iaef) junto con la consultora Econviews mostró una mejora de 13,4 puntos en enero. "Si bien continúa severamente estresado, consolidó su cuarta suba mensual consecutiva. En niveles, el estrés de las condiciones financieras es comparable al del colapso de las condiciones externas en los meses finales de la crisis financiera de 2008/2009", señaló el informe difundido hoy.

Tal como recordaron, en enero el Gobierno dio las primeras señales respecto a su estrategia para afrontar los vencimientos de deuda a corto plazo: siguió pagando la deuda en pesos, lo que provocó importantes subas en estos títulos al bajar el temor a un nuevo reperfilamiento, y confirmó que seguiría pagando la deuda en dólares en legislación local y extranjera, tras haber vuelvo a reperfilar las Letes en dólares en manos de personas jurídicas. Esto se sumó a la aprobación en el Congreso a mediados de diciembre de un fuerte aumento de impuestos para mejorar el resultado fiscal, señales que contribuyeron a distender las condiciones financieras.

"En este contexto, el Indice de Condiciones Financieras volvió a mejorar y acumuló su cuarta suba mensual consecutiva, de la mano de una nueva recuperación de las condiciones locales, en tanto las externas se mantuvieron estables. Así, las condiciones financieras continuaron en la senda de la recuperación, aunque permanecen aún en zona de estrés severo, producto del colapso de las condiciones locales en agosto y septiembre. El agravamiento de la crisis que siguió a las PASO trajo, entre otros efectos adversos, la imposición de controles cambiarios y el reperfilamiento de las letras de corto plazo bajo ley local, tras el cierre del mercado local para el Gobierno y la profundización de la salida de depósitos en dólares", señalaron desde Iaef y Econviews.

Según observaron, en los últimos cuatro meses se dio una lenta pero hasta ahora sostenida recuperación, que se tradujo en un repunte de las reservas internacionales gracias a la compra de dólares por parte del BCRA, una tenue suba de los depósitos en dólares del sector privado y una disminución del riesgo país, entre otros efectos. "Así, las condiciones locales mejoraron 12 puntos en el mes, en tanto que las condiciones externas avanzaron apenas 1,4 puntos. Así, el ICF en enero avanzó 13,4 puntos en el mes para ubicarse en -91 puntos, en zona de estrés severo. Este nivel es comparable al del colapso de las condiciones externas en los meses finales de la crisis financiera de 2008/09", señaló el informe.

El repunte de las condiciones locales se apoyó sobre todo en una menor depreciación esperada, el recorte de tasas en pesos y la baja del riesgo país. Aún así, se ubican en -125.9 puntos, uno de los peores registros desde la crisis 2001/2002, aunque mejorando respecto al piso de septiembre, cuando el subíndice había sufrido de lleno el impacto de los resultados sorpresivos de las PASO de agosto. A diciembre, el 40% de las variables locales que componen el subíndice se encuentran fuertemente estresadas, destacándose el riesgo país, el riesgo legislación y la confianza en los bancos. Hay que retrotraerse a la crisis de 2001 para encontrar niveles de estrés local mayores a los actuales.

En cuanto a las condiciones externas, mejoraron apenas 1,4 puntos, su quinto avance mensual hasta ubicarse en 34,9 puntos. "Las condiciones externas hace más de un año que se encuentran en zona de confort. El avance mensual fue empujado por una mayor confianza entre bancos y mejoras en la liquidez global. La mejora de los últimos meses se explica por los avances comerciales entre EE.UU. y China, los buenos datos de EE.UU. y el relajamiento monetario de los bancos centrales. Si bien en el caso de la Fed ya no se esperan nuevas bajas de tasa de política para 2020, el BCE sigue con la compra de activos. En cuanto a las economías emergentes y en particular Latinoamérica, cedieron levemente las presiones políticas que tuvieron comienzo en octubre pasado y habían causado volatilidad", explicó el estudio.

De ese modo, el ICF en enero se ubicó 65 puntos por debajo de un año atrás. El deterioro anual se explicó completamente por una caída de 100 puntos en las condiciones locales, producto de la fuerte suba en el riesgo país, una menor confianza en los bancos y mayor riesgo legislación. Las condiciones externas, por su parte, contribuyeron a compensar esta caída, ya que mostraron una mejora de 35 puntos respecto a un año atrás, sobre todo por mejores condiciones para los emergentes y la buena performance de las acciones en EE.UU. "Con todo, el ICF se ubica muy lejos de los máximos de 70 puntos alcanzados a fines de 2017", señalaron.

¿Cómo seguirán las condiciones financieras? Según el estudio conjunto de Iaef y Econviews, la economía argentina siempre creció en forma sostenida cuando las condiciones financieras se mantuvieron en zona de confort durante un lapso prolongado. "Ante el reciente colapso de las condiciones financieras, cabe esperar que la actividad económica siga cayendo durante buena parte del año 2020", concluyeron.

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