En 2019, el Gobierno anterior logró ubicar el resultado primario dentro del margen acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La meta pactada era cerrar el año con déficit primario cero, pero la misma tenía un rango de tolerancia de un déficit de hasta 0,5% sobre el Producto Interno Bruto (PIB). No obstante, el resultado era previsible, ya que la evolución del desempeño de los últimos meses de 2019 proyectaba que la cifra final se ubicaría dentro del límite estipulado.
De acuerdo con los datos difundidos anoche por el Ministerio de Economía, el sector público nacional registró durante 2019 un déficit primario sin ingresos extraordinarios de $208.766 millones, lo que implica un saldo negativo de 0,96% sobre el PIB. Computando los ingresos extraordinarios, el resultado primario del año pasado arrojó un déficit de $95.121,6 millones, lo que representa un rojo de 0,44% sobre el PIB.
Por su parte, el déficit financiero de 2019, sin contar los ingresos extraordinarios, se situó en $933.052 millones, que equivale a 4,28% del PIB. Contabilizando los ingresos extraordinarios, el déficit financiero del año pasado fue de $819.406 millones que, medido en términos del PIB, representa un saldo negativo de 3,76%.
El Gobierno anterior logró ubicar el resultado primario dentro del margen acordado con el FMI: la meta era llegar al déficit primario cero, pero tenía un rango de tolerancia de hasta -0,5% del PIB.
“En efecto, en 2019 se percibieron ingresos extraordinarios, destacándose el traspaso de Lotería Nacional a la órbita de la Ciudad de Buenos Aires ($4.813,6 millones), registrados como ingresos corrientes. Además, se percibieron recursos por ventas de activos fijos por parte de empresas públicas ($44.595,5 millones) y transferencias por parte del FGS a la Anses con destino al financiamiento del Programa de Reparación Histórica ($64.236,0 millones), ambos registrados como recursos de capital”, detalló el Ministerio en un comunicado.
De acuerdo con la cartera económica, “la profundización del déficit financiero se debe a que en 2019 se pagaron $724.285,3 millones (sin incluir los intereses pagados intra sector público) en concepto de intereses de la deuda, aumentando en 86,2% de manera interanual, representando el 18,4% de los ingresos totales del sector público nacional”.
Los datos oficiales indican que los ingresos totales de 2019 ascendieron a $3.937.073,5 millones, aumentando 51,4% respecto al desempeño del año anterior. Dentro de éstos, sobresalieron los ingresos por derechos de exportación, que aumentó 304,6% interanual, y el IVA neto de reintegros, que creció 38,4% interanual. En cuanto a los gastos primarios, en 2019 ascendieron a $4.032.195 millones, aumentando 37,2% interanual. Las prestaciones de la seguridad social tuvieron un crecimiento interanual de 44,5%, destacándose las asignaciones familiares (+40,9%) y las jubilaciones y pensiones contributivas (+44,5%). En tanto, el gasto de capital tuvo un incremento de 12,4% interanual, en el que sobresalieron las variaciones negativas en educación (-36,2%), vivienda (-12,9%) y energía (-9,5%), mientras que el alza estuvo en transporte (+55,7%) y agua potable y alcantarillado (+28,8%).
“En 2019 se evidenció un aumento de la deuda exigible con respecto a 2018. El mismo fue de $93.165,3 millones, que está explicado por la diferencia entre el stock correspondiente al año 2019 ($282.349,8 millones) y el de 2018 ($189.184,5 millones)”, indicó el informe.
“Si se tomaran en consideración los ingresos mencionados (es decir, el adelantamiento de los derechos de exportación y los retrasos en los reintegros del IVA) y el incremento de la deuda exigible, el déficit primario alcanza los $360.657,4 millones (-1,66% del PBI), mientras que el financiero aumenta a $1.084.942,7 millones (-4,98% del PBI)”, añadió.
