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Los gestos de unidad de Alberto Fernández en su mensaje

10 diciembre de 2019

A pocos minutos de asumir como Presidente de Argentina, Alberto Fernández pronunció su primer discurso en la Asamblea Legislativa. El mandatario ya comenzó a plasmar un estilo propio a la investidura y, aunque fue sumamente crítico con la gestión del macrismo, tendió puentes con el radicalismo y el resto de las fuerzas políticas.

El discurso de Fernández fue celebrado en los medios por su apertura y corrección. Si bien el mandatario prefirió leerlo, trascendió que fue escrito por su puño y letra. Como se fijó como uno de los objetivos de su gestión es dejar atrás la grieta, en su mensaje inaugural hizo referencias a figuras políticas de distinto origen político y que en algunos confrontaron entre sí. Esas menciones pretendieron tener un alto valor simbólico.

Tuvo un lugar protagónico el ex presidente Raúl Alfonsín, a quien citó tanto en la apertura como en el cierre: "Cuando mi mandato concluya, la democracia argentina estará cumpliendo cuarenta años de vigencia ininterrumpida. Ese día quisiera poder demostrar que Alfonsín tenía razón, que con la democracia se cura, se educa y se come". También reconoció explícitamente que los avances en materia de derechos humanos comenzaron en 1983 y que fueron retomados en 2003.

Por otro lado, como era de esperarse, la figura de Juan Domingo Perón también fue destacada por Fernández: "Seguimos apostando por una América Latina unida, para insertarnos con éxito y con dignidad en el mundo. En 1974, el general Juan Domingo Perón señalaba que 'a niveles nacionales, nadie puede realizarse en un país que no se realiza. De la misma manera, a nivel continental, ningún país podrá realizarse en un continente que no se realice'”.

Asimismo, el discurso contuvo otra señal a favor de la unidad nacional cuando citó a a Domingo Faustino Sarmiento y Juan Bautista Alberdi: "La Argentina se hizo valiosa cuando Alberdi y Sarmiento trabajaron para que la educación sea pública. Se hizo rica con la Reforma Universitaria. Se hizo más potente cuando el justicialismo declaró la gratuidad de la enseñanza universitaria".

Fernández no quiso olvidar a nadie, y en la lista de menciones especiales también figuró Arturo Frondizi: "Entendemos que un nuevo contrato de ciudadanía social implica poner en marcha una gesta educativa, científica y tecnológica. Como alguna vez dijera Arturo Frondizi, debemos lanzarnos 'con decisión y coraje a la conquista del futuro'".

Por último, pero no menos importante, fue el rol que le otorgó Fernández en su discurso al ex presidente Néstor Kirchner: "El sueño de una Argentina unida no necesita unanimidad. Ni mucho menos uniformidad. Para lograr el sueño de una convivencia positiva entre los argentinos, partimos de que toda verdad es relativa. 'Tal vez de la suma o la confrontación de esas verdades podamos alcanzar una verdad superadora', supo decir con acierto Néstor Kirchner", expresó, al tiempo que recordó que fue Kirchner quien en el año 2003 le "permitió participar de la maravillosa aventura de sacar a la Argentina de la postración".

Hacia el final agradeció especialmente "la generosidad y la visión estratégica que nuestra vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, ha expresado en este tiempo de la Argentina".

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