Los radicales están decididos a permanecer en Juntos por el Cambio, pero se preparan para exigir una relación más igualitaria en la coalición. A pesar de la derrota en las elecciones presidenciales, el centenario partido aparece bastante cohesionado frente a la nueva etapa. Así quedó en evidencia en un encuentro que el martes a la noche reunió a legisladores nacionales de distintas épocas para festejar la obtención de las intendencias de La Rioja y Rawson.
Si bien la UCR perdió varias capitales provinciales, controla tres gobernaciones y ganó bancas, tanto en Diputados como en el Senado. En términos de poder institucional, tiene una fuerza equivalente, o superior a la del PRO que sólo lo supera en el número de diputados y en la importancia de las intendencias que gobierna en la provincia de Buenos Aires.
Entre los radicales, se destaca el esfuerzo final de Mauricio Macri pero hay cuestionamientos a la actitud que consideran pasiva de María Eugenia Vidal luego de las primarias.
En las próximas semanas se tratarán de poner en marcha mecanismos de coordinación entre los partidos que integran la coalición y deberá definirse la conducción de los interbloques en el Congreso. Los radicales aspiran a retener la presidencia de ambos en manos del senador Luis Naidenoff y del diputado Mario Negri que tienen una muy buena relación con sus colegas macristas.
A su vez, habría acuerdo para que Alfredo Cornejo sea reelecto como presidente del Comité Nacional para sostener la línea que acaba de expresar en un reportaje publicado en el diario Clarín. Sus propios correligionarios lo definen como un dirigente “difícil” y “áspero” pero entienden que puede ser importante en esta etapa.
Otro tema a resolver en las próximas semanas el de la Auditoría. La designación del auditor general de la Nación le corresponde a la UCR por ser el partido de oposición con mayor número de legisladores en el Congreso como establece el artículo 85 de la Constitución Nacional.
Jesús Rodríguez, que actualmente es auditor, cuenta con todos los requisitos técnicos para ser designado, además de contar con un amplio apoyo partidario para ocupar ese cargo.
