Al igual que los días previos, la divisa mantuvo una presión alcista en la última rueda de la semana, lo que obligó la temprana participación de bancos oficiales en el mercado para abastecer la demanda. Finalmente, el dólar mayorista subió 7 centavos y cerró a $57,85 para la compra y $58,05 para la venta.
El dólar minorista, mientras tanto, se mantuvo a $59,50 en el BNA.
De ese modo, el peso se depreció 0,1%, en tanto que la moneda en la plaza informal cayó 0,79%, a aproximadamente $63,50 unidades. En la operatoria de arbitrajes de activos para hacerse de dólares (conocida como contado con liquidación), dados los recientes controles, se ubicó en $69,57.
En la semana que acaba de finalizar, el tipo de cambio mayorista acumuló una suba de 32 centavos respecto al cierre del viernes pasado, con actividad constante del BCRA.
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Por otro lado, en la primera licitación de Leliq se adjudicaron $64.435 millones a una tasa máxima de 68,05%, mínima de 68% y promedio de 68,02%. En la segunda, por $147.981 millones, la tasa máxima fue 68,05%, la mínima 68% y la promedio 68,02%.
De ese modo, el BCRA bajó otro escalón la tasa promedio total del día, que se ubicó en 68,02% (la de ayer fue de 69,48%).
“A pesar de las restricciones cambiarias impuestas por el Gobierno, el BCRA continúa perdiendo reservas, por lo que si las elecciones no producen un cambio de expectativas, deberá seguramente incrementar los límites de compra de moneda extranjera”, estimó la correduría Allaria Ledesma a Reuters.
A nivel regional, las monedas y bolsas mejoraron a medida que los inversores retomaban el apetito por activos de riesgo debido al mejor ambiente dentro de las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China.
